Cumpliendo poco más de tres décadas, el equipo multidisciplinario del centro de salud destaca por una labor servicial, muy marcada por la humanización de la atención
Fundada en 1993, con el objetivo de brindar tratamiento renal sustitutivo (TRS) a quienes cursan una enfermedad crónica afín, la unidad comenzó a funcionar en el otrora Hospital Regional de la capital de O´Higgins, con sólo dos pacientes. En la actualidad, atendiendo las necesidades de la comunidad, la cifra supera los 80, personas con que el equipo del Hospital Dr. Franco Ravera Zunino (HFRZ), entre ellos, TENS, enfermeros, médicos y oficial administrativo, quienes trabajan para revertir sus patologías, mejorar sus condiciones de salud y favorecer, asimismo, la oportunidad de ser trasplantados en el futuro. No obstante, esto no ha sido exclusivamente, lo que ha venido definiendo a esta unidad del HFRZ.
“Nos define nuestro compromiso por entregar una atención humanizada y en ello es que hemos ido avanzando en el curso de estos 31 años que hoy cumplimos. La rutina con nuestros pacientes, nos genera una familiaridad, una cercanía y empatía distintas, los conocemos, y a sus familias. En parte, porque están 12 horas semanales con nosotros -3 veces por semana-, pero por, sobre todo, porque nos encargamos de motivarlos a reinsertarse en la vida cotidiana una vez terminado este tránsito, representándoles un apoyo que trasciende el tratamiento dialítico, que ofrece una visión integral para su recuperación o para mejorar su calidad de vida”, expresa la Dra. Heidi Olivares, jefa de la Unidad de Hemodiálisis del HFRZ.
Con lo anterior, la facultativa subraya que “nuestras metas están enfocadas en lograr mediante nuestro servicio, que las personas que llegan acá con sintomatologías que afectan sus órganos, enfermedades renales crónicas en periodo avanzado, en etapa cinco, que se someten a esta terapia, en que el paciente conecta por acceso vascular a un riñón artificial para depurar su sangre, no sólo tengan una buena adherencia al tratamiento, sino que sean trasplantados”, añadiendo que “para ello, trabajamos en obtener aquellas herramientas que nos lo posibiliten”.
La Dra. Olivares enfatiza que “tenemos una diversidad etaria muy extensa en tratamiento TRS, de 23 a 93 años, muchos de ellos manteniéndose por largo tiempo, como se ha dado con un paciente que cumplió 25 años realizando su terapia acá, lo que refuerza nuestro compromiso por buscar más alternativas que innoven en el resultado de las terapias, sumando más profesionales y técnicos al equipo (que hoy suma más de 35 funcionarios), en pos de impactar positivamente la vida, especialmente de nuestros adultos mayores”.
En esa línea, la jefa de la unidad señala que “la terapia ocupacional para nuestros pacientes de la tercera edad, podría facilitarnos, y está comprobado en estudios referentes, una reinserción más rápida a los quehaceres de la vida cotidiana, al trabajar aspectos mentales y físicos. En ese sentido, queremos avanzar ofreciendo en el corto plazo, ejercicios físicos de intradiálisis”, finalizando que, “la idea es que sigamos en la línea de la humanización, personalizando nuestro servicio y validando lo que nuestros pacientes refieren sobre nuestros tratamientos, que describen como algo muy agradable, cuyo alcance sobrepasa la hemodiálisis en sí misma, que ven como un apoyo abierto que favorece su bienestar”.