El Tribunal de Juicio Oral en lo Penal de Rancagua condenó a Fabián Arturo Reyes González a la pena de 5 años de presidio, con el beneficio de la libertad vigilada intensiva por igual lapso en calidad de autor del delito frustrado de homicidio
En fallo unánime (causa rol 473-2017) el tribunal –integrado por los magistrados Felipe Cortés Ibacache (presidente), Miguel Ángel Santibáñez Artigas y Gladys Medina Montecino (redactora)– aplicó, además, a Reyes González las accesorias legales de inhabilitación absoluta perpetua para derechos políticos y la inhabilitación absoluta para cargos y oficios públicos durante el tiempo de la condena, además del pago de las costas del proceso.
Una vez ejecutoriado el fallo, el tribunal dispuso que se proceda a la toma de muestras biológicas del sentenciado para determinar su huella genética e inclusión en el registro nacional de ADN de condenados.
El tribunal dio por acreditado, más allá de toda duda razonable, que en horas de la noche del 11 de enero de 2016, el afectado, Cristián Cornejo fue a dejar en su vehículo a una amiga hasta su casa en Villa El Villorrio, lugar donde apareció sorpresivamente el cónyuge de la mujer, el acusado Reyes González de quien se encontraba separada de hecho, quien sin mediar provocación, «comienza a perseguir a Cristián Cornejo en su vehículo marca Chevrolet, modelo Tracker, por las diversas calles de Rengo, colisionándolo en diversas oportunidades en la parte posterior del móvil».
La víctima intenta tomar la Ruta H-60, en dirección a la comuna Quinta de Tilcoco, pero el condenado le obstruye el paso nuevamente, obligando a la víctima a regresa hacia Rengo. Sin embargo, al llegar a la altura del kilómetro 2, es nuevamente colisionado intencionalmente por el imputado en la parte posterior del móvil, provocando que perdiera el control y volcara el vehículo al interior de una zanja, huyendo el imputado del lugar.
Producto de lo anterior, la víctima queda inmovilizada al interior del vehículo. Otros conductores solicitaron asistencia médica y policial, siendo trasladada la víctima al Hospital de Rengo y luego derivada al hospital de Rancagua, donde se constató que presentaba «un TEC trauma medular, trauma raqueo medular, luxación C5-C6 de carácter grave. Con secuela neurológica irreversible de inmovilidad en extremidades inferiores y manos».