Más de 300 personas han participado activamente en las cuatro reuniones informativas sobre las modificaciones que se implementarán en la Ruta 66, en el trazado vial del proyecto en las comunas de Malloa y San Vicente
“Construir con los territorios, escuchar a los vecinos y autoridades locales es el mandato del Presidente Boric, y eso es lo que estamos haciendo con esta importante obra que está impulsando el Ministerio de Obras Públicas en nuestra región”, son las palabras de María de los Ángeles Latorre, seremi de MOP O’Higgins, a la hora de referirse a la serie de reuniones con la comunidad y alcaldes de Malloa y San Vicente, donde se dieron a conocer diversas modificaciones que contempla la construcción de la Ruta 66.
El proyecto ha despertado una serie de dudas e inquietudes de los vecinos, especialmente en materia de expropiación, por lo que la seremi del MOP O’Higgins, encomendada por la Ministra de Obras Públicas, Jessica López, conformó mesas de trabajos con diversas localidades, reuniendo a vecinas y vecinos, los municipios de Malloa y San Vicente con los representantes de la Dirección de Concesiones, Inspección Fiscal y de la Sociedad Concesionaria Ruta de La Fruta.
Por lo mismo, la seremi María de los Ángeles Latorre destacó que «este proceso de diálogo y búsqueda de soluciones refleja nuestro compromiso con la comunidad de escuchar a los territorios, y con ello, mitigar el impacto en las familias que se ven afectadas por la construcción de obras e infraestructura que buscan aportar al desarrollo social y económico de nuestra región”.
Nilsa Rojas, de la junta de vecinos de Requegua, en San Vicente, celebró los cambios del trazado del proyecto, indicando que “el hecho de reducir el proyecto de la carretera salvó muchas casas, casi el 80% de las casas se están salvando, por eso agradezco el gesto de buena voluntad que han tenido por darle una solución a las personas. Es gratificante saber que el gobierno nos escucha, y nos ha puesto atención y está tratando de solucionar de la mejor forma posible, el proyecto de la carretera, que no la pedimos nosotros, pero es necesaria”.
Destacar que la iniciativa abarca aproximadamente 141 kilómetros de vialidad interurbana, incluyendo construcciones de dobles calzadas, ampliaciones a segundas calzadas y rehabilitación de calzadas simples, con aproximadamente 70 kilómetros correspondientes a variantes de la Ruta 66 existente.
En este sentido, el alcalde de Malloa, Luis Barra indicó que “la gente estaba muy molesta, pero después de escuchar a la gente de Concesiones, y a la seremi de Obras Públicas, quedaron todos conforme. Ya están absolutamente informados los vecinos de lo que se va a desarrollar. Así que muy contento por los resultados obtenidos, a partir del nuevo trazado que va tener la concesión de la Carretera de la Fruta”.
Por su parte, Mónica Cabezas, directora de Obras Municipales de la municipalidad de San Vicente, señaló que “las reuniones han tenido una buena recepción, pues al generar una menor expropiación, la respuesta ha sido muy positiva y la comunidad ha agradecido el trabajo de la mesa y de Concesiones. El municipio seguirá apoyando como intermediario, entre la Dirección de Concesiones y la comunidad”.
El proyecto de la Ruta 66, «Carretera de la Fruta», busca mejorar la conexión de uno de los principales corredores de transporte de productos agro-frutícolas del país, elevando estándares técnicos y niveles de servicio para incrementar la seguridad vía de la ruta y facilitar el acceso a los puertos de Valparaíso y San Antonio.