El gimnasio “techado” de San Fernando era una caldera. Transcurrió más de una década, según los propios asistentes, para ver nuevamente repleto el recinto
La jornada era la propicia, ya que, Tinguiririca buscaba el título en la LNB2 y para alcanzarlo, los locales ingresaron “prendidos”.
Solo en el inicio ya marcaron diferencias, tras lograr un parcial de 9-0, hecho que determinó el control absoluto del juego, salvo algunos pasajes del cotejo, donde Manquehue, fruto de su vergüenza deportiva, atacó para estrechar las cifras.
Ya en los minutos finales y con la algarabía propia de una victoria anhelada por todos, los colchagüinos dirigidos por Héctor Vera, dejaron caminar el reloj hasta encontrarse en los abrazos del triunfo.
El marcador electrónico dijo en cifras para la historia (95-66) que TSF volvió a la primera división del básquetbol chileno y comienza desde este instante a delinear su próximo gran desafío.
Al respecto, el Seremi del Deporte, Diego Ramírez, manifestó su orgullo, “por el salto cualitativo y cuantitativo del plantel y sus dirigentes. Sé del esfuerzo, el tesón y la constancia que imprimieron para llegar al éxito. Cuando construyeron este sueño, me invitaron y de inmediato me di cuenta del compromiso que tenían. Ahora se debe pensar en el paso siguiente, por eso ya estamos analizando las vías para seguir apoyando económicamente al club. Este triunfo es mérito de toda la ciudad”.
Por último, Julius Holt jugador de TSF y figura del partido, hizo un llamado a las autoridades, “porque de ellos depende sostener una entidad como esta. Nosotros pasamos, pero las instituciones quedan, no pierdan la oportunidad de renovarse en el éxito”, concluyó.