La región registró 300 siniestros que entregaron indemnizaciones por más de 700 millones de pesos
Las lluvias extemporáneas de fines de enero pasado que para muchos agricultores representaron una debacle, para Manuel Ureta y Rienzi Cáceres, dos pequeños agricultores de San Vicente de Tagua Tagua, son casi una anécdota. Siguiendo las sugerencias de profesionales de INDAP, ambos productores se anticiparon a los hechos y contrataron el Seguro Agrícola que los protegió ante esta catástrofe que afectó sus cultivos de cebollas y ocasionó la pérdida total de sus siembras. Se trató de un fenómeno climático, inusual para la época y para la zona centro sur del país, y que abarcó desde Valparaíso hasta Los Lagos, causando daños irreparables en múltiples plantaciones.
Gracias a esta acción previsora, Manuel Ureta fue indemnizado con 570 Unidades de Fomento (UF), unos 17 millones de pesos aproximadamente, tras certificarse la pérdida de 3,2 hectáreas de cebollas. En tanto, Rienzi Cáceres recibió una indemnización que bordea los cinco millones de pesos (171 U.F) por los daños que la lluvia generó en una hectárea de cebollas.
Para conocer cómo el Seguro Agrícola les permitió enfrentar estas dificultades, el director nacional de INDAP, Carlos Recondo, visitó a ambos productores en sus predios en el sector de La Estocada en San Vicente de Tagua Tagua. Junto a ellos abordó las ventajas y seguridades que entrega este instrumento a los agricultores ante eventuales riesgos como lluvias fuera de temporada, heladas o granizadas, eventos cada vez más recurrente en nuestro país.
En palabras de la autoridad a través del Seguro Agrícola, “INDAP pone a disposición de la Agricultura Familiar Campesina un instrumento con una importante ayuda del estado, para protegerlos de algo que hoy se nos hace casi permanente: las situaciones adversas y extemporáneas, cada vez más frecuentes producto de este cambio climático que ya está instalado. Junto con adaptar la agricultura a esta nueva realidad, es importante ofrecerles a nuestros productores instrumentos que los protejan y les den certezas y seguridades respecto a sus procesos productivos”.
El Seguro Agrícola es una herramienta de transferencia de riesgo que el Ministerio de Agricultura, por medio de INDAP y Agroseguros, pone a disposición de los pequeños agricultores del país. INDAP cuenta con cinco tipos de seguros para rubros como cultivos anuales, frutales, bovinos, ovinos y también para emprendimientos apícolas. Posee un subsidio estatal que llega hasta un 95% del costo de la prima neta no subsidiada por Agroseguros; los porcentajes de copago para cada agricultor oscilan entre un 5 y un 10%. Cultivos anuales, bovinos, ovinos y Apícola, pagan un 5% del total de la póliza; frutales, el 10%. Este instrumento protege cultivos y animales frente a diferentes fenómenos climáticos y está disponible para todos los usuarios de INDAP acreditados que posean una explotación agropecuaria ubicada en una zona asegurable; la solicitud debe realizarse en las agencias de área de INDAP en las que son atendidos regularmente.
Manuel Ureta cultiva zapallo camote, melón tuna y cebollas de guarda, producción que vende directamente en su predio. Relata que “a finales de enero estaba a punto de cosechar cuando vino la lluvia y dañó las cebollas; se pudren porque les entra agua”. Tras cuatro meses recibió una millonaria indemnización que le permitió recuperar su capital de trabajo, comprar productos y continuar con su actividad. En su opinión “hay que tomar seguros en todo lo que es siembras, porque el costo del seguro por hectárea es bajo; lo que pierde uno si no lo hace es mucho y ahora que aseguré esas hectáreas me di cuenta de que fue bueno”.
Durante 2020, INDAP registró un total de 989 siniestros que generaron el pago de más de $1.401.945.538, unas 47.165 UF. El 96% de ese monto son indemnizaciones para cultivos anuales; el 4% restante cubrió daños y pérdidas en especies frutícolas. Cada beneficiario recibió una indemnización promedio de $1.417.538. La región de O’Higgins en específico registró 300 siniestros que entregaron indemnizaciones por $703.121.220. A nivel nacional, los cultivos más afectados fueron arroz, cebolla, papa, melón tuna, tomate, sandía y maíz grano. En frutales, uva de mesa, manzana, frambuesa y arándano.
En su recorrido por la Sexta Región el director nacional de INDAP también visitó las obras del canal Alto Requegua que consideran el revestimiento de 260 metros del acueducto. Las obras tendrán un costo de $71.802.000, de los que $59.595.000 provienen del Fondo de Emergencia Transitorio (FET), recursos destinados por el gobierno para impulsar la reactivación económica y enfrentar la crisis generada por la pandemia por Covid-19. “Estos trabajos nos van a cambiar todo. El agua se aumentará en al menos un 60%, lo que nos da mucha más certeza para nuestros cultivos”, comentó el presidente de la Comunidad de Aguas Alto Requegua, Fernando Pérez.