El programa del Ministerio de Vivienda y Urbanismo generó esta instancia como respuesta a la inquietud de vecinas y vecinos que padecen enfermedades como la diabetes o quieren desarrollar un estilo de vida más saludable
Según la Sociedad Chilena de Obesidad, somos el segundo país del mundo con mayor consumo de pan por habitante, con cifras que bordean los 90 kilos por persona de forma anual. Sin embargo, una parte de la población, como es la que padece diabetes o son celíacos, necesitan alternativas al plan blanco, que es por lejos el de mayor consumo. En esa línea, la SEREMI de Vivienda y Urbanismo, a través del programa Quiero mi Barrio, implementó un taller de panadería integral vegana en la población Manuel Rodríguez, iniciativa que tuvo una gran aceptación entre las vecinas y vecinos del sector.
Con un cupo inicial para 15 personas, finalmente fueron más de 20 las que se sumaron al taller, que tuvo su jornada final esta semana, con una degustación de todos los productos saludables preparados por las y los participantes. Para el seremi de la cartera, Óscar Muñoz Lara, este tipo de actividades son las que marcan el espíritu de la intervención del programa Quiero mi Barrio: “se trata de reconocer distintas realidades, abriendo espacios de participación y también de reconocerse como parte de un mismo territorio”.
“La gran mayoría de los participantes de este taller son adultos mayores, los que tienen una mayor conciencia del cuidado de su cuerpo y de su salud. En ese contexto, trabajar con harinas integrales tiene que ver con una cultura del autocuidado, pero también de compartir experiencias comunes. Nuestra idea es robustecer el tejido social en el barrio. Que las familias se conozcan y de esa forma asentar el programa Quiero mi Barrio en la Manuel Rodríguez”, destacó la autoridad.
María Valle, integrante del Consejo Vecinal del Barrio Manuel Rodríguez, valoró positivamente la experiencia por varias razones: “aprendimos mucho y conocimos a varios vecinos con los que no teníamos mucho contacto. Tenemos la esperanza de tener un nuevo taller en el futuro, ya que es muy importante desde el punto de vista de la salud y el cuidado, sobre todo para los que tenemos alguna enfermedad”.
LOS BENEFICIOS DEL PAN INTEGRAL
Maria Eugenia Pedroso, uruguaya, fue la tallerista principal del curso. Con una diabetes tipo 1 diagnosticada desde hace varios años, se ha interesado por aprender y enseñar diversas técnicas de comida saludable, mismas que presentó a las vecinas y vecinos del barrio.
“El 95% de los chilenos consume pan planco. Por eso me parece muy importante llevar a los barrios esta experiencia que consiste en que cada uno pueda hacer su propio pan integral y saber cuáles son sus beneficios”, explicó.
“Existe una gran diferencia –destacó- entre comer un pan blanco, con un 95% de índice glucémico, es decir que actúa como azúcar en el cuerpo, y comer pan integral que presenta un 50% de índice glucémico. Esto significa que en este último caso los nutrientes entran de forma más natural en el cuerpo”.
“El taller tuvo muy buen resultado, les gustó mucho a los participantes”, indicó María Eugenia, resaltando el interés de participar de la comunidad, ya que “no faltaron a ninguna clase”.
BARRIO MANUEL RODRÍGUEZ
El Programa Quiero mi Barrio se encuentra presente en el barrio Manuel Rodríguez de Rancagua desde el año 2020. Cuenta con un ambicioso Plan Maestro que fue elegido por los mismos vecinos y vecinas del sector y que contempla el reacondicionamiento del bandejón del sector y el mejoramiento de la iluminación de las calles Martínez de Aldunate e Ignacio de la Carrera, entre otras obras.
Referente a las actividades que considera el Plan de Gestión Social, están los talleres deportivos para niños y adolescentes, talleres de estimulación para adultos mayores, talleres laborales, nivelación de estudios, alfabetización digital y talleres de liderazgo, entre otros.
