La lobesia botrana ha contado con un exitoso control por parte de los productores chilenos en trabajo conjunto con el SAG, sin embargo, el control en zonas urbanas ha resultado especialmente dificultoso por razones técnicas, económicas y operativas
La polilla del racimo de la vid (lobesia botrana) corresponde a una plaga cuarentenaria en Chile, de alta importancia económica, dado que sus larvas atacan los racimos de la vid (vitis vinifera), donde perfora y consume internamente las bayas, generando daños y podredumbre. También ataca los frutos de otras especies, como por ejemplo el arándano (vaccinium spp.), siendo considerada plaga cuarentenaria en algunos países de destino de fruta chilena de exportación.
La lobesia botrana ha contado con un exitoso control por parte de los productores chilenos en trabajo conjunto con el SAG, sin embargo, el control en zonas urbanas ha resultado especialmente dificultoso por razones técnicas, económicas y operativas, por lo cual el SAG ha evaluado distintas opciones de control de la plaga en estas condiciones, como por ejemplo a través de su control biológico. Como resultado de lo anterior y por encargo especial del Programa de Control Oficial de Lobesia botrana en Chile, el año 2015 el SAG inició el desarrollo de un programa de control biológico clásico de la polilla del racimo de la vid, a través de la introducción a Chile de un enemigo natural específico de la plaga, que posibilitara la reducción de sus poblaciones en las áreas urbanas.
Campoplex capitator es un endoparasitoide solitario primario y específico de lobesia botrana, originario de Europa, el cual parasita las larvas de 2° a 4° estadío durante las tres generaciones de la plaga. Esta es la especie que SAG O’Higgins comenzó a liberar en zonas urbanas específicas de la región para el control natural de la polilla y evitar que emigre al campo y cuidar así las inversiones de tantos productores locales.
En su lugar de origen es considerado el parasitoide más importante y con niveles de parasitismo de hasta 54%. Entre las características más importantes de esta microavispa se encuentra su alta especificidad dado que ataca únicamente a las larvas de lobesia botrana, parasita las larvas de todas las generaciones de la plaga, está presente en distintas condiciones ambientales, no se comporta como hiperparasitoide, no tiene alternacia de hospedantes y tiene una adecuada capacidad de dispersión natural, siendo en algunas áreas su único enemigo natural observado, por lo que se considera a esta especie como un organismo benéfico promisorio para el control de la polilla lobesia botrana en áreas urbanas.
La directora del SAG O’Higgins, Paola Conca, luego de liberar un grupo de ejemplares de esta microavispa en un parrón casero de la comuna de Nancagua, señaló que “estamos en presencia de la primera liberación de estos ejemplares y esperamos que los resultados nos permitan disminuir estas poblaciones en zonas urbanas, que son el reservorio natural de la Lobesia y desde allí migran a los campos. Dado el excelente resultado de multiplicación a nivel de laboratorio que hubo del Campoplex capitator, esperamos en un tiempo cercano poder construir y habilitar nuestro propio laboratorio, para poder hacer liberaciones masivas pero controladas”. En tanto, el SEREMI de agricultura de la Región de O’Higgins, Joaquín Arriagada, que también participó de la liberación señaló que “el Servicio Agrícola y Ganadero una vez más nos está demostrando el enorme trabajo de investigación y desarrollo que realizan no solo en la región, sino que a nivel país para proteger las inversiones de nuestros productores con técnicas naturales, inocuas, ha sido el compromiso del Presidente Sebastián Piñera con la agricultura y seguiremos trabajando en pos de ello”, cerró la máxima autoridad del agro de la región.