El conversatorio se desarrolló en dependencias de la Universidad de O’Higgins y contó con la presencia de exponentes con una vasta experiencia en la temática
Con el objetivo de fortalecer y generar reatroalimentación sobre los factores que influyen en la vida de los jóvenes que ingresan por Ley de Responsabilidad Penal Adolescente (LRPA) al Sename, se llevó a cabo en la Universidad de O’Higgins un conversatorio sobre la temática y su análisis epistemológico para profesionales del área de Justicia Juvenil.
Uno de los primeros exponentes, el psicólogo e interventor clínico Daniel Bernardo, del centro Hernán Émeres del colaborador Asociación Cristiana de Jóvenes (ACJ), manifestó que “fue un espacio enriquecedor y propició la visualización de la tarea cotidiana que realizamos las organizaciones colaboradoras del área de Justicia y Reinserción Juvenil, con el compromiso de muchos profesionales que aportan en la vida de las y los adolescentes y jóvenes que atendemos”.
“Otro de los aspectos que me gustaría destacar, es que se pudo instalar en la conversación la importancia que toma la experiencia de los equipos interventores, la investigación desde la academia y la aplicación de técnicas basadas en el estado del arte, es decir, considerando los hallazgos en el área de la Psicología, Psicología Social, Sociología y demás Ciencias Sociales”, agregó el profesional.
Por su parte, el sociólogo y académico Alejandro Romero, explicó que su exposición se centró en “el cambio que se ha ido generando en el mundo juvenil delictual, pasando de la antigua imagen del choro ladrón en tránsito hacia la nueva figura, la del narco, tomando más poder esta última, como modelo a seguir, la cual no se siente parte de un tejido social o no se circunscribe a las prácticas comunitarias, sino que más bien aspira a manejar circuitos comunitarios, queriéndose instalar como el dueño de la población”.
“A esto, se le suma otra práctica relacionada a la ostentación delictiva en redes sociales, hecho que no sólo pasa por vanagloriarse con la práctica delictiva, sino que también es una forma de denotar la prominencia delictiva y su trayectoria”, puntualizó Romero.
Para la directora regional (s) del Sename O’Higgins, Pamela Urquhart, este conversatorio permitió generar un espacio colaborativo entre los equipos. “Fue una actividad muy enriquecedora, donde se pudo conocer la realidad a la que se enfrentan hoy en día los profesionales que atienden a los jóvenes que ingresan a la red Sename, instalando un espacio de colaboración mutua que busca mejorar las instancias de intervención individual, comprendiendo las dinámicas sociales y disruptivas que influyen en los adolescentes”.