Nacer en un hospital es lo más frecuente y común que puede ocurrir, pero vivir en el por espacio de 2 años es verdaderamente conmovedor
Cristofer nació en el hospital, conoce de memoria a sus tías tens del servicio de pediatría, enfermeros y médicos, hoy tras dos años de vida, emprende un nuevo y desconocido viaje hacia su casa en la comuna de Paredones, un lugar que de todas maneras lo deslumbrará al sentir y dar un paso hacia lo desconocido.
Este pequeño habitante del Servicio de Pediatría, junto a otros dos compañeros de habitación, no habían conocido hasta hoy otro entorno que el de las instalaciones del Hospital Regional Libertador Bernardo O”higgins ( HRLBO ) y de sus camas, instaladas una al lado de la otra y separados solamente por los ventiladores, monitores y maquinas que hacen posible cada día sus existencias y que no aminoren sus ganas de vivir y que gracias al programa de asistencia ventilatoria invasiva y no invasiva pueden llegar a sus hogares y conocer su entorno.
La Dra. Heydi Leiva, jefa del Servicio de Pediatría del HRLBO, señaló que al igual que muchos otros niños que hemos tenido y que también ingresaron a este programa ministerial, se van a su casa con toda la implementación que entrega el Ministerio de Salud, además el equipo de salud del hospital capacitó a las madres de los niños en todos los procedimientos de enfermería que deben enfrentar y que ellos requieren” dijo la jefa del servicio infantil.
Los pacientes desde su nacimiento presentaron problemas neurológicos o neuromusculares , lo que hacía imposible que los pequeños pudiesen respirar sin el apoyo de ventilador mecánico y del equipamiento respctivo, por lo cual debían permanecer hospitalizados y entubados a través de una traqueoctomía y conectados a un ventilador.
La Dra. Sylvia Poblete, Pediatra Broncopulmonar del HRLBO indicó que “ los pequeños pacientes y amigos que ya se van de alta y que ingresaron al programa ministerial denominado “ Programa de asistencia ventilatoria invasiva y no invasiva en niños, consiste en entregarles apoyo con un ventilador mecánico, monitores y equipo profesional de médico, enfermera y kinesiólogo que van al domicilio del paciente, además de los insumos requeridos, sentenció la especialista.
Daniel , vecino de cama de Cristopher también de 2 años, es inquieto y siempre está preparado para contestar de una u otro forma cuando alguien pregunta algo, señalando rápidamente con su dedo índice la respuesta indicada, lo que significa que su nuevo entorno familiar despertará nuevas inquietudes en estos pequeños, que salen entre comillas a conocer el mundo
Este programa se refiere al cuidado de un paciente en su domicilio con todos los cuidados que su condición requiera. Este sistema se convierte hoy en una importante alternativa y necesidad en momentos que los centros asistenciales están atochados de pequeños enfermos, y por los muchos beneficios que ofrece, entre ellos disminuir el riesgo de infecciones cruzadas, tan en boga hoy, los costos de tratamiento en relación a la hospitalización tradicional, menor estrés familiar y, sobre todo, porque contribuye a una mejor recuperación o expectativa y calidad de vida del paciente, según sea el caso o condición.
Para sus madres esta posibilidad es maravillosa, significa poder estar más cerca de sus hijos, ahorrar en viajes y tiempo lo que es fundamental para la vida familiar, así lo manifestó Alejandra Ahumada, mamá de Daniel, “cuando Daniel nació tuvo una asfixia neonatal, posteriormente le afectaron diversos síndromes y debilidad en los músculos de su cuerpo, lo que le impedía respirar.
Es una gran felicidad para nosotros como familia volver a casa con Daniel y que conozca su entorno y donde vive, dijo la atribulada progenitora.
Para el padre de Diego esta es una excelente noticia, especialmente por qué lo podrá tener más cercano, ya que se hacía cada día mas difícil venir a visitarlo por su trabajo, hoy ya estará en casa aprendiendo nuevas cosas, señaló Daniel padre de Diego.
Por su parte Elba Manriquez la mamá de Christofer, indicó que se creó un lazo muy grande con el personal de salud del hospital, pero feliz porque va a casa, sus hermanos no lo ven de diciembre y para ellos será una sorpresa ´pues no les avisé que Daniel va a casa.
Gracias a este programa del ministerio de salud a través de la subsecretaría de redes asistenciales estos pequeños de 2 años, Daniel de la comuna de Coltauco y Cristopher de Paredones pudieron llegar a sus hogares y estar junto a su familia, conociendo lo que es su casa y porque no cultivar algunos amigos.