Tras su renuncia al «Consejo de Prevención de Abusos» el Obispo de la diócesis de Rancagua, se dirigió hasta la parroquia Nuestra Señora de las Nieves» ubicada en Paredones donde ofició la misa dominical
Monseñor Goic, señaló en su intervención de la misa dominical que » es lamentable todo lo que ha sucedido en estos días, y recalcó que se está trabajando arduamente para aclarar lo que a pasado».
Además el Obispo de Rancagua manifestó que «no se puede condenar a todos los sacerdotes suspendidos en la diócesis, sin saber fehacientemente todo los hechos ocurridos,llamando a los fieles a mantener viva la iglesia y no juzgar antes de que sean las investigaciones quines los determinen».
De los catorce sacerdotes ancionados, sólo uno de ellos sería responsable por un presunto abuso sexual, los demás serían por otras situaciones contrarias a la integridad sacerdotal, compo faltas al celibato con mayores de edad, entre otras faltas administrativas.