La Corporación del Desarrollo e Innovación de la Municipalidad de Rancagua adquirió 10 impresoras 3D para la fabricación de más de 5 mil protectores faciales que serán donados al personal de salud de la comuna
A partir de esta semana comenzó a funcionar la nueva fábrica de protectores faciales 3D en la comuna de Rancagua. Se trata de una iniciativa de la Municipalidad de Rancagua y realizada por su Corporación de Desarrollo e Innovación.
La institución municipal adquirió diez impresoras 3D, las que están trabajando a toda su capacidad para fabricar 120 protectores faciales al día, mediante diseños que han sido probados en otros países y que tienen la característica de ser reutilizables, desmontables y sanitizables.
“Este proyecto tiene que ver con resolver una dificultad: la falta de un stock adecuado de protectores faciales, que principalmente lo requieren quienes están en el área de salud. En el caso del Municipio de Rancagua, son más de mil funcionarios y que son los primeros que tienen que contar con estas pantallas. Agradecemos el trabajo y el compromiso de los que están en esta labor en la Corporación de del Desarrollo e Innovación de la Municipalidad, porque estamos resolviendo un problema en lo inmediato” señaló el alcalde de Rancagua, Eduardo Soto Romero.
Por su parte, Cristián Urrutia, Director Ejecutivo de la Corporación de Desarrollo de la Municipalidad de Rancagua aseguró que “estamos trabajando las 24 horas para lograr generar la mayor cantidad de protectores faciales. La idea es cubrir las necesidades de los grupos que los necesitan, proteger a nuestro equipo de salud para que continúen su labor. Los protectores faciales son desmontables, sanitizables y reutilizables. Esperamos poder fabricar cerca de 5 mil en las próximas semanas”.
Cabe destacar que estos elementos ya se encuentran siendo distribuidos y se espera que todos los funcionarios de salud y de los equipos municipales que deben seguir trabajando en terreno, puedan tener una para su propia seguridad y la del equipo completo que se pone en riesgo día a día, para poder seguir cumpliendo con las labores municipales necesarias para la comunidad.