“Ya no se trata de hablar de cierta patología de base o grupo etario, nos enfrentamos a una pandemia que cambia constantemente, de hecho, hoy las Unidades de Cuidados Intensivos están ocupadas por gente muy joven”
Desde marzo que las cifras de casos positivos covid han ido aumentando considerablemente, al punto de estar casi toda la región en cuarentena, con todo lo que ello conlleva, es por esto que la Directiva del Colegio Médico de O’Higgins nuevamente llama al autocuidado de la ciudadanía, a mayores fiscalizaciones y de tratar de bajar la movilidad.
Hoy nos enfrentamos a una cifra catastrófica, O’Higgins ya cuenta con más de mil muertos a causa del covid, hoy viernes la cifra suma 1.008 fallecidos. Son más de mil las familias que han perdido a un ser querido, pérdidas irreparables, donde como gremio también lamentamos la muerte de médicos y médicas por esta pandemia.
El Colegio Médico de O’Higgins nuevamente hace un llamado al autocuidado, a seguir respetando los protocolos básicos, como el uso de la mascarilla, el lavado frecuente de manos, el salir de casa sólo si es necesario, respetando las distancias físicas y los aforos. La vacunación es importante, permite que si hay un contagio las complicaciones sean menos severas, pero no priva de contraer esta enfermedad. Ya no se trata de hablar de cierta patología de base o grupo etario, nos enfrentamos a una pandemia que cambia constantemente, de hecho, hoy las Unidades de Cuidados Intensivos están ocupadas por gente muy joven.
Cada semana vemos como grupos de personas se siguen reuniendo en diversas actividades, como matrimonios, asados, carreras de caballos, entre otras actividades, incumpliendo los protocolos, la cuarentena y el toque de queda. O’Higgins es una de las regiones con el mayor número de personas detenidas. Durante la semana del 12 al 18 de abril hubo 1.932 detenidos, de los cuales 1.563 fueron por delitos en contra de la salud pública, los que lamentablemente han ido en aumento y las sanciones al incumplimiento de las normativas no se ven reflejadas a la ciudadanía, por lo que no hay un efecto de cambio de conducta que resulte en una disminución de casos.
Basta de la inercia y la necesidad de ser fiscalizados para cumplir los cuidados, es necesario un cambio proactivo de trabajo conjunto para salir de esta situación, de lo contrario estaremos inmersos en cuarentenas largas e inefectivas que afectan el bienestar biopsicosocial y espiritual.
A más de un año en pandemia, los equipos médicos ya no dan abasto, están cansados y estresados, los requerimientos y exigencias son cada día mayores, a esto se suma el estrés que producen en la ciudadanía las cuarentenas, las que podrían ser más efectivas si todos los actores de la sociedad cooperáramos en bajar la movilidad y frenar el aumento exponencial de casos.
Hoy más que nunca es necesario ser parte activa en el manejo de esta pandemia, ya que los efectos no son sólo en la salud física, sino que también en salud mental.