En comisión especial y de manera unánime el Consejo Regional de O’Higgins aprobó financiar la creación de esta agrupación musical conformada por 24 internos
Violines, violas, cellos y contrabajos serán los instrumentos que conformarán la primera orquesta penitenciaria de Chile, iniciativa de la Defensoría Regional de O’Higgins que cuenta con el apoyo de Gendarmería, la Fundación de Orquestas Juveniles e Infantiles (FOJI) y que se concretó con el apoyo de algo más de 17 millones de pesos por parte del Consejo Regional a través del 2% del Fondo Nacional de Desarrollo Regional (FNDR) destinado a proyectos de Cultura.
El proyecto está basado en la experiencia venezolana de la Fundación Musical Simón Bolívar, donde gracias a las clases de interpretación musical, ensayos y presentaciones los internos han logrado – entre otras cosas – sentirse fortalecidos y útiles como personas, rebajar en un 98% los episodios violentos y de autoagresiones, mejorar el cumplimiento de la normativa penal y enseñar adoptar habilidades sociales como el trabajo en equipo, solidaridad, sentido de pertenencia, compromiso y comunicación.
El equipo regional de Defensoría de O’Higgins ha trabajado además en formar las redes de apoyo necesarias para el éxito del proyecto, para ello hoy cuenta también con la asesoría del Consejo de la Cultura y las Artes, la empresa concesionaria Siges y la Fundación Toccata, quienes desde sus distintos ámbitos se han motivado a participar de la creación de esta orquesta por la alta rentabilidad social que tiene y el apoyo a la reinserción social de las personas infractoras de ley, lo que evidentemente repercute en la seguridad pública.
Para el Defensor Regional, Alberto Ortega Jirón, “lo que hace el CORE y el Gobierno Regional con esta votación es rendir homenaje a su tradición de apoyo a las iniciativas que buscan la rehabilitación de personas condenadas. La gran apuesta con este proyecto es bajar las tasas de reincidencia de los penados y – de ese modo- combatir con eficiencia el flagelo de la delincuencia, pero en ese derrotero hablamos también de transformar a las personas, cambiar su cultura y su mundo de marginalidad por otro más bello, más profundo y sublime como es el de la música”.-