Pasadas las 22 horas de este miércoles, las autoridades regionales acompañaron a personal de Carabineros, Ejército y funcionarios de la salud en dos puntos de control
Con el fin de potenciar las fiscalizaciones en comunas que se encuentran en cuarentena y evitar el tránsito innecesario de personas en horario de toque de queda, el Intendente Ricardo Guzmán y el Seremi de Salud Pablo Ortiz lideraron un punto de control en Rancagua y Machalí.
“El comportamiento de las personas no ha sido el mejor. Detectamos a ciudadanos transitando sin el permiso correspondiente y entregan distintas excusas. Este tipo de operativos se agradecen y también se valoran, porque refleja un esfuerzo tanto de las Fuerzas de Orden y Seguridad, del Gobierno y de las autoridades sanitarias, para el cumplimiento de las medidas impuestas. Sin embargo, falta colaboración de la comunidad para frenar los contagios en la región. Es primordial que las personas le tomen el peso a la situación que estamos viviendo”, enfatizó el Intendente Ricardo Guzmán.
A quienes no respeten el toque de queda y la cuarentena total en las comunas que se encuentran en fase uno y dos, se le aplicarán multas y penas de cárcel en base a lo establecido el Código Sanitario y el Código Penal.
En la oportunidad, el Seremi de Salud aseguró que “estuvimos en la ruta entre Rancagua y Machalí para fiscalizar el cumplimiento del toque de queda, y además el horario de cierre de locales. Y lamentablemente nos encontramos con una gran cantidad de infracciones e incumplimientos. La irresponsabilidad de estas personas coloca en peligro la salud de la comunidad y existe un claro problema de comportamiento. Hago un llamado a la sensatez y a tomar conciencia sobre la grave situación epidemiológica que enfrentamos. Si no nos cuidados, el panorama regional será aún peor”.
En la oportunidad, las autoridades sanitarias también monitorearon el horario de cierre de distintos locales comerciales ubicados en ambas comunas.