Cuidar las horas de sueño, poner atención a los hábitos de alimentación e incentivar la actividad física en casa son parte de las recomendaciones para poder sobrellevar el confinamiento en medio de la pandemia del Covid-19
Gran parte de la población ha experimentado cambios drásticos en su rutina durante los tres meses de emergencia por el COVID-19 en Chile. Cuarentenas, teletrabajo, la preocupación de no tener un ingreso permanente, conciliar las obligaciones laborales con niños en la casa, soledad y el miedo al contagio son factores que han gatillado en muchos casos problemas en la salud mental.
Especialistas coinciden en que uno de los factores más complejos es el aislamiento social. Un encierro prolongado puede acarrear consecuencias que van desde dificultad para dormir, ansiedad, irritabilidad, angustia, hasta crisis de pánico y depresión.
«Los trastornos se ven incrementados con el bombardeo constante de información negativa y en algunos casos imprecisa a través de redes sociales», explica el psicólogo Eduardo Larraguibel Munizaga, especialista de Medismart.live, plataforma que ofrece servicios de telemedicina en diversas áreas a precios asequibles para las personas.
Entre los adultos, el especialista asegura que las dificultades del sueño, por ejemplo, se ven agravadas a raíz del estrés generado por el temor a perder la salud, a ser despedidos o a los cambios laborales. «Esto puede provocar múltiples síntomas como depresión, crisis de pánico, angustia, somatizaciones como alergias nerviosas, tics, pérdida de cabello, entre otras», apunta.
Niños, adolescentes y adultos mayores
La falta de interacción física con sus pares es una de las consecuencias más duras el encierro para la población más joven, pudiendo desencadenar en ansiedad y depresión, sostiene Eduardo Larraguibel. «Si bien son la generación de la tecnología, necesitan de igual manera de instancias de interacción física. Al colegio y al jardín los jóvenes no solo van a aprender, también se relacionan con sus pares, se divierten, pelean, se enamoran. Todos estos procesos son vitales», profundiza.
Por su parte, la población de avanzada edad sufrirá una profundización de sus cuadros preexistentes. Larraguibel explica que a esto puede sumarse «el riesgo de padecer depresión a raíz del aislamiento, pues se provoca sensación de abandono. Sus círculos cercanos se ven fuertemente afectados por la alta mortandad, provocando además un incremento de sensación de fragilidad».
Establecer rutinas y mantenerse activos
Eduardo Larraguibel enfatiza que, al detectar cualquier cambio de conducta o de ánimo de algún cercano, se le debe brindar asistencia psicológica especializada para evitar cuadros más graves. En este sentido, explica que es vital cuidar las horas de sueño, poner atención a los hábitos de alimentación e incentivar, en la medida de lo posible, los deportes en casa.
El psicólogo de Medismart.live recomienda «mantener la rutina lo más normal posible. Esto abarca al horario para todas las actividades desde el ir a dormir y despertar, como los alimenticios, laborales y recreativos». Otro aspecto clave para mantener la salud mental es evitar la sobreinformación, fomentar el contacto con familiares y amigos y llevar la atención a actividades que se pueden hacer en casa como el reparar aquellas cosas que se encontraban en mal estado o iniciar algún proyecto artístico.
Munizaga recalca que es fundamental la atención profesional. Entendiendo que los valores en Chile por estas prestaciones son muy altos, Medismart.live cuenta con planes pensandos en todos los bolsillos, que incluyen horas ilimitadas de psicología por $3.990 al mes.