El Programa Hospital Amigo que se creó en el año 2006, adquirió una gran relevancia durante el período de pandemia, porque si bien se debieron suspender algunas medidas, se crearon nuevas estrategias orientadas a mantener las vías de comunicación entre los usuarios, sus familias y el equipo médico
En el caso del Hospital de Pichilemu, esto adquirió aún mayor relevancia, dado que muchos pacientes fueron derivados incluso de otras comunas, para realizar parte de su período de hospitalización en este establecimiento, lo que demandó el implementar sistemas de horario protegido de entrega de información a los familiares y el uso de videollamadas para que los pacientes hospitalizados pudieran mantenerse comunicados con su red de apoyo más cercana.
Así lo explicó la encargada del Programa Hospital Amigo en Pichilemu, Carolina Vargas Valencia, quien destacó que esta iniciativa se orienta principalmente a la satisfacción usuaria “buscando lograr una salud más amable y principalmente acogedora, por lo cual las medidas buscan tanto mejorar el trato, como lograr un mayor acompañamiento a los pacientes en su proceso de hospitalización y entregar la información pertinente a la familia”.
En épocas normales, las medidas de Hospital Amigo se orientan a las horas de visita, el acompañamiento de niños, niñas y adultos mayores durante la hospitalización, el acompañamiento durante el parto, la adecuada identificación de los funcionarios y de cada uno de los pacientes hospitalizados, al igual que a la entrega de información en las unidades de emergencia y los servicios clínicos.
“A través de estas medidas se busca favorecer la vinculación del usuario, la familia y el equipo de salud -explica Carolina Vargas- y si bien por la emergencia sanitaria, algunas medidas han tenido que ser suspendidas, en el hospital se ha buscado estrategias para mantener la comunicación de los usuarios y sus familiares a través de horario protegido de 9 a 10 horas, para la entrega de información a través del teléfono 722336646 y con el uso de videollamadas para mantener la comunicación del usuario y su red de apoyo más cercana”.
Asimismo, durante el año pasado se realizó un trabajo destinado a favorecer el egreso hospitalario del servicio de hospitalización, a través de planes de cuidado enfocado en los cuidadores, las comorbilidades y la prevención de caídas en Adultos Mayores “lo anterior con la finalidad de disminuir el riesgo de hospitalización y favorecer el cuidado en el domicilio de los usuarios, así como acompañar a los cuidadores en el proceso de la recuperación de la salud de sus familiares, luego del alta médica del servicio de hospitalización”.
Todo lo anterior, con el objeto de que, junto al aspecto médico del tratamiento del usuario, se trabaje también el aspecto emocional y social “que es parte del proceso de recuperación y que ayuda a humanizar la salud que entregamos cada día”.