Siendo la tercera causa de muerte en Chile, después del cáncer gástrico y biliar, ya no solo afecta a adultos desde los 50 años, también incidiría en los más jóvenes, a raíz de factores como el sedentarismo, mala alimentación y excesos
“Este cáncer es uno de los más frecuentes. Va en aumento y constituye una causa de mortalidad importante en Chile, siendo la tercera causa de muerte, después del cáncer gástrico y biliar”, así lo señala el Dr. Javier Anabalón, oncólogo médico y jefe del Servicio Oncología del Hospital Regional del Libertador Bernardo O´Higgins (HRLBO), quien expresa que la ocurrencia de esta patología ya no solo se enfoca en adultos mayores, sino que abarca también a población más joven, grupo que está más vulnerable a factores de riesgo y estilos de vida que podrían condicionar la aparición de esta enfermedad.
Con lo anterior, el profesional del Hospital Regional de Rancagua, describe a esta patología -que implica el desarrollo anómalo de células del colon y zona rectal- como una enfermedad que, si es detectada a tiempo, puede ser tratada con buenos resultados, lo que advierte que la persona tenga capacidad de prestar atención a la existencia de antecedentes familiares de cáncer, principalmente en la esfera digestiva, además de observar la presencia de condiciones inflamatorias, intestinales, crecimiento de pólipos en el colon, entre otros signos; para evaluar la realización de exámenes que permitan detectar el cáncer.
“En el día mundial de la lucha contra el cáncer de colon, es relevante insistir en la mantención de hábitos saludables, conocer el historial familiar en relación al cáncer, pero, sobre todo, considerar cómo está nuestra salud en el presente. Si notamos bajas de peso sin explicación ni régimen, cursamos una anemia que no tiene causa clara, sentimos dolor abdominal, vemos cambios intestinales en la eliminación de heces y su consistencia, o hay deposiciones con sangre, entonces debemos realizar el estudio correspondiente”. En ese sentido, el Dr. Anabalón apunta a la realización de una colonoscopía para estudiar el interior del colon y recto.
En cuanto a la prevención, Anabalón menciona que “al movernos más, bajar el consumo de azúcares y grasas, asimismo el tabaco y el alcohol, mantener un consumo alimenticio rico en fibras, con verduras, frutas, estamos ayudándonos. La idea es llevar una vida lo más sana posible, descartando la presencia de patologías como este cáncer colorectal u otros trastornos, como el colon irritable, que vale mencionar, no se asocia con este cáncer como si lo hace una colitis ulcerosa”.
Sobre la pandemia por coronavirus, el jefe del Servicio de Oncología del Hospital Regional del HRLBO indica que, “ha incidido en la detección precoz de esta enfermedad”, agregando que muchos pacientes han recibido un diagnóstico tardío vinculado a las restricciones sanitarias, que, en muchos casos, se tradujo en que evitaron concurrir al establecimiento, por temor a contagiarse de covid-19, asistiendo posterior y finalmente con cuadros de hemorragia digestiva, complejizando el tratamiento.
No obstante, el especialista puntualiza que, “pese a que las circunstancias que acompañan a la emergencia sanitaria han influenciado en el cuidado de la salud de muchas personas, se debe mantener una actitud cautelosa al respecto y consultar precozmente frente a molestias u otras señales”, finalizando que, “el cáncer de colon o colorectal se puede tratar. Se certifica a través de una biopsia, se valora luego si está localizado o metastásico. Si es localizado se evalúa intervención quirúrgica y en etapas más avanzadas es posible intervenir con quimioterapias, para así, detener el avance del cáncer y alargar la sobrevida”.