La parroquia “Inmaculada Concepción de La Compañía”, en Graneros, es un símbolo del catolicismo, no sólo en la Región de O’Higgins, sino en todo el país
Sin embargo, esta fiesta de pasión y amor, se vio truncada por el 27F del año 2010, cuando los añosos muros de adobe, no resistieron la fuerza del terremoto que destruyó la iglesia. El templo que fue construido en el año 1758 por la orden jesuita, estuvo en el piso y hoy emerge para ser devuelto a la comunidad (la ceremonia se iniciará hoy viernes 17 de marzo, a partir de las 10:00 horas), luego de muchas diligencias y tratativas, que encabezó el alcalde Claudio Segovia.
“Es una maravilla observar cómo quedó. Yo la vi caer y fue terrible para nosotros y los feligreses. Por eso, es tan gratificante estar en este lugar y comprobar que está de vuelta, tras numerosas reuniones, mucho trabajo y discusiones para conseguir recursos, que finalmente aprobó el Consejo Regional de O’Higgins”, dijo el edil.
PROYECTO INTEGRAL QUE MANTIENE DISEÑO ORIGINAL
En cuanto al proyecto de edificación, se reconstruyó la nave central, utilizando las evidencias del piso que quedaron del terremoto, y la torre, según la arquitectura original. En la zona presbiterio, se anexó una nave central a cada lado de él, formando una cruz para recibir más fieles. La cubierta es íntegramente de tejuela de arcilla.
El programa arquitectónico global, contempla 1785,90 metros cuadrados, generando así, una parroquia con capacidad para 210 personas. De igual modo, se reconstruyó el retablo.
