Un informe de ALTO reveló que en este primer semestre del año, las incautaciones tuvieron lugar en doce comunas de la región, las que alcanzaron un avalúo de $29.632.000, dejando un saldo de 16 detenidos
Un informe sobre microincautaciones de cigarrillos de contrabando en la Región de O’Higgins, realizado por ALTO, reveló que en el primer semestre de este año se incautaron 11.853 cajetillas en doce comunas de la región -Rancagua, Chimbarongo, San Fernando, San Vicente, Peralillo, Graneros, Rengo, San Francisco de Mostazal, Nancagua, Santa Cruz, Olivar y Machalí-, dejando un saldo de 16 detenidos.
En comparación con el 2022, se observó un mayor número de comunas fiscalizadas, pasando de tres a doce, y se incrementó en 36 el número de procedimientos. Solamente en los meses de abril, mayo y julio se realizaron 56 procedimientos, mientras que en el mismo periodo en el año pasado hubo 23.
Los procedimientos se llevaron a cabo en Rancagua, con 5.773 cajetillas y 55 procedimientos; en Chimbarongo, 2.482 cajetillas y tres procedimientos; en San Fernando, 1.560 cajetillas y cuatro procedimientos; en San Vicente, 740 cajetillas y dos procedimientos; en Graneros, 264 cajetillas y dos procedimientos; en Rengo 204 cajetillas dos procedimientos; en San Francisco de Mostazal 172 cajetillas y dos procedimientos; en Nancagua, 69 cajetillas y un procedimiento; En Santa Cruz 68 cajetillas y un procedimiento; en Olivar 29 cajetillas y un procedimiento y en Machalí, 12 cajetillas y un procedimiento.
El informe destaca que las comunas de Rancagua, Rengo y Graneros están presentes en ambos períodos (primer semestre del 2022 y 2023) con un total de 6.241 cajetillas, “transformándose en las comunas con mayor presencia de venta de cigarrillos ilegales en la región de O’Higgins».
Es importante destacar que el análisis se basa en la información proporcionada por Carabineros de Chile y la Policía de Investigaciones (PDI) sobre las microincautaciones de cigarrillos de contrabando efectuadas en la Región de O’Higgins durante abril de 2023.
Según el estudio «Pack Swap 2022», realizado por el centro de investigación Mide UC de la Pontificia Universidad Católica de Chile, el contrabando de cigarrillos genera una pérdida fiscal de hasta US$800 millones al año.