Autoridades nacionales se reunieron para exponer, desde distintas miradas, iniciativas para mejorar la políticas de persecución a los diferentes delitos que azotan a la región
En la Casa Central de la Pontificia Universidad Católica de Chile se realizó el seminario “Actualización sobre crimen organizado y delitos transnacionales: experiencias desde la persecución penal”, que tuvo cómo finalidad generar un consenso sobre lo que se entiende por crimen organizado y los delitos transnacionales que están ocurriendo en Chile, además de mejorar las prácticas para perseguir estos delitos.
Entre los expositores se contó con la participación de Hugo Soto, jefe unidad de Crimen Organizado; Tania Gajardo, subdirectora Unidad de crimen organizado de la Fiscalía Nacional; Johnny Fica, subprefecto jefe de la Brigada de Lavado de Activos de la Policía de Investigaciones; y el Coronel Claudio Hermosilla de Carabineros, entre otros especialistas.
En la instancia se desarrollaron diferentes paneles sobre el crimen organizado y los delitos transnacionales, experiencia institucionales en la lucha contra este tipo de crimen, y la persecución penal, la coproducción y corresponsabilidad de seguridad.
En esa línea, Tania Gajardo, manifestó que es extremadamente relevante abordar esta temática. “El Fiscal Nacional ha hecho este llamado insistentemente, necesitamos cambiar la estrategia para tener nuevos y mejores resultados. Que se base en un trabajo interagencial y coordinado; esa es una de las claves”, dijo.
Hugo Soto, jefe de la unidad de Crimen Organizado del Ministerio del Interior, expuso sobre el escenario actual del crimen organizado en Chile, reconociendo que la criminalidad se ha modificado con el tiempo, y además, abordó la política Nacional contra el Crimen Organizado. “En el norte hay mayor presencia de delitos ligados al narcotráfico y trata de personas, con un aumento de los homicidios, mientras en el sur aparece el robo de madera como uno de los principales delitos”, agregó.
Desde Carabineros de Chile, el Coronel Claudio Hermosilla, manifestó las dimensiones que les otorga la ley 21.575, con la que se modifican los cuerpos legales para la persecución del narcotráfico y crimen organizado. “Ahora se regulan los bienes que se incautan, con esto se les puede dejar en la ruina económica a estas organizaciones criminales para que no puedan levantarse”, comentó.
Johnny Fica, subprefecto jefe de la Brigada de Lavado de Activos de la Policía de Investigaciones, abordó la importancia que ha tomado el contrabando para las bandas criminales, las que están haciendo un negocio sumamente lucrativo. “Hay organizaciones transnacionales dedicadas al contrabando de cigarrillos que acumulan más de $4 mil millones, solo en efectivo”, ejemplificó.
La conclusión de los expositores coincide en que mediante el diálogo se puedan generar soluciones de cara a una política unificada de tratamiento y colaboración recíproca entre los distintos organismos públicos de control y persecución penal, para cumplir con el orden jurídico.