Chile es un país de situaciones ocasionales, el país del ‘ voy y vuelvo ‘, del ‘ mañana te llamo ‘, de los ‘ maestros chasquillas ‘, el país del ‘ alambrito ‘ para todo, del país ‘ a medias ‘, del país ‘ de vez en cuando ‘…
Todas aquellas son figuras y modos de ser que algunas personas celebran, porque expresan la idiosincrasia …
Fue el poeta nacional – hermano de Violeta – Nicanor Parra, quien escribió en su poema Chile, los versos : ‘ Creemos ser país / y la verdad es que somos apenas paisaje ‘.
Hoy la televisión mostró otras espeluznantes imágenes – cada día los canales exhiben signos de la decadencia que como sociedad se vive : asaltos, crímenes, estafas, violencia aguda, miseria social y otras calamidades. Aquellas otras imágenes esta vez dan cuenta de la fuga de 9 pequeños niños que permanecían en un hogar-residencia del SENAME ( Servicio Nacional de Menores ), esto en la ciudad de Rancagua. Primero, los menores de 8 y 9 años se ven sobre las altas techumbres de la casa que les servía de albergue, luego escalan los muros, saltan y salen a la calle semidesnudos, desnutridos y con claros signos de haber sufrido golpes, maltrato físico de quienes debían estar a su cuidado.
Tales escenas se han repetido antes en otras ciudades, en Santiago, Valparaíso, Puerto Montt. Diversas personas han calificado al mencionado Sename como cárcel de menores, espantoso infierno en el que los niños y también jóvenes sufren despiadados maltratos, violaciones, abandono, desprecio y total desamparo, hasta la muerte de más de 1300 de ellos en un determinado período. Son ellos los olvidados de una sociedad – abandonados por sus familias – y luego caídos en el citado Sename.
Ningún gobierno de los hasta aquí habidos en el plazo de más de 30 años han asumido realmente el tema, el problema humano y social de esos infantes. El Estado es el gran ausente. No existe el personal calificado para atender esa delicada responsabilidad, ni psicólogos, ni pedagogos. Cualquiera sin preparación profesional asume cargos y tareas al interior de esos recintos. Se sabe que la institución es un botín político – como otros servicios – en los que se pagan favores de esa naturaleza, por lo tanto, de ética, nada.
Uno de los eslóganes dichos en campañas políticas decía ‘ Los niños primero-s en la fila ‘. Se equivocaron, mintieron, era un embuste. La cruel realidad es ‘ Los niños primero-s fugándose ‘ de esa violencia, del horror que sufren en esos recintos.
Otro notable escritor-bardo- académico nacional, Enrique Linh, escribió el poema ‘ Nunca salí del horroroso Chile ‘.