Profesionales de este establecimiento y del hospital de San Fernando realizaron por primera vez intervención para corregir una grave malformación mandibular
Por primera vez se realizó una cirugía ortognática en el Hospital de Santa Cruz, intervención maxilofacial de alta complejidad, que permitirá cambiar la vida un paciente que, durante sus 24 años de vida, se vio afectado tanto física como emocionalmente por una grave malformación mandibular.
Al respecto, el director del Servicio de Salud O’Higgins, Jaime Gutiérrez agradeció a los equipos de los hospitales de Santa Cruz y San Fernando “que hicieron esta novedosa cirugía que viene a cambiar la vida de este paciente, por eso felicito a estos equipos clínicos que han desarrollado esta cirugía que irá en directo beneficio de los usuarios de la red”.
El Jefe del Departamento de Odontoestomatología (disciplina que se centra en el tratamiento integral de la boca, incluyendo paladar, lengua, labios y mandíbula.) del Hospital Santa Cruz, doctor Jorge Troncoso, manifestó que esta fue la primera vez que se realizó este tipo de intervención quirúrgica en la micro área de Colchagua “y para nosotros es un tremendo orgullo como servicio hospitalario y Servicio de Salud O’Higgins entregar esta nueva prestación a muchos pacientes que sufren de este tipo de patología maxilofaciales y nos abre la puerta para poder seguir trabajando y poder generar muchas más oportunidades para distintos tipos de pacientes”.
La referente de odontología del Servicio de Salud O’Higgins, María José Ossandón, precisó que se estuvo trabajando durante casi dos años para poder conciliar los equipos que pudieran realizar esta cirugía “y así entregar esta prestación para enfrentar las malformaciones severas de los pacientes con un equipo que no sólo incluye a los cirujanos maxilofaciales o implantólogos, sino que también a kinesiólogos, fonoaudiólogo, psiquiatra, sicólogo e incluso trabajador social que nos apoyó para poder gestionar el financiamiento por parte del Servicio de Salud de un examen de los maxilares del cráneo, que no se realiza ni siquiera en la región”.
Asimismo, lo reafirmó el doctor Rodrigo Cosmelli, cirujano maxilofacial del Hospital de San Fernando, quien destacó que la cirugía ortognática “que se efectúa para corregir las anomalías dentomaxilofaciales que puedan tener algunos pacientes, es un trabajo que se realiza de manera multidisciplinaria y donde participan distintos profesionales de la salud”.
Para el odontólogo Ericks Rodríguez participar en esta cirugía va más allá de sólo el trabajo profesional “yo mismo fui paciente en 2016 y entiendo profundamente lo que es este cambio para nuestros pacientes y gran parte de lo que me motivó para llegar a este hospital era que venía con muchas ganas de poder llevar adelante este proceso y poder avanzar con lo que la cirugía ortognática significa para nuestros pacientes”.
El doctor Troncoso agregó que en la realización de la cirugía tuvieron un gran apoyo de la Dirección de Servicio porque se requiere “de un arduo proceso y gestión para poder realizar un procedimiento de alta complejidad en un hospital como el nuestro, que implica un arduo trabajo con el equipo de cirugía maxilofacial en planificación 3D, impresión 3D, bio modelos, planificación quirúrgica en software, para así dar a nuestro paciente la más alta calidad de atención con los mejores estándares”.
La doctora Ossandón destacó la importancia de comenzar con los controles de los niños “que parten desde el programa CERO en atención primaria, a los 6 meses del paciente, esto permite generar el acompañamiento y mantener en constante controles a nuestra población, porque si bien los niños no se pueden operar, si se pueden realizar acciones correctivas para los casos menos complejos y cuando ya se estima que hay una malformación severa se comienza a preparar al paciente desde los 12 años para una intervención futura”.
Agregó que estas operaciones ortognáticas tienen un impacto no sólo en mejor la armonía facial, sino que en el aspecto social de los pacientes “porque incluso está descrito en la literatura que muchos llegan al suicidio por lo que significan esta malformaciones y en el caso de este paciente de Santa Cruz una de la pabelloneras que participó en la intervención, fue compañera de curso del paciente y sabía lo retraído que era y como lo molestaban en el colegio, por lo que al ver que lo operaban estaba más que feliz por lo que significaría para él”.