El paisaje desolador y la pérdida de viviendas son factores que inciden fuertemente en el ánimo de los afectados, según señala el equipo de profesionales
El interior escondido del secano costero de la región de O’Higgins se llevó la peor parte del incendio. Localidades como Pumanque, Marchigüe, Litueche y Navidad, por nombrar algunas, deberán levantarse poco a poco en un proceso que no durará semanas, sino, meses y años.
Ante esta realidad acudimos a los psicólogos de la Unidad de Salud Mental del Hospital de Marchigüe: Luilly Gómez y Patricia López, quienes nos entregaron su visión profesional del escenario actual, luego de visitar a los afectados por la catástrofe.
¿Qué porcentaje de la población creen ustedes que resultó afectados por el incendio en la comuna de Marchigüe? ¿Y cuáles son su apreciaciones profesionales de lo que está ocurriendo con los afectados?
“En primer lugar creemos que de cierta manera todos nos hemos visto o veremos afectados. Piense usted en la variable ambiental, que quizás sea algo que no esté siendo contemplado. Los alrededores de las comunas de Colchagua y Cardenal Caro se encuentran incinerados y será algo que tomará largo tiempo en recuperar. Viajar por acá era algo que invitaba al descanso, hoy ese escenario ha cambiado, en el trabajo en terreno hemos podido escuchar a las personas que sienten que el paisaje se parece mucho al de una guerra: lugares donde existía un bello entorno natural hoy está completamente desolado. Existen estudios que seguramente muchos, desde el sentido común, pueden avalar, vivir en ambientes afectados por una catástrofe incide en el estado de ánimo y/o facilita el ánimo depresivo”.
“Ahora bien, el grado de afectación posiblemente no será el mismo para todos, las consecuencias y las vivencias de estos eventos no son posibles de generalizar, la historia particular de cada sujeto es muy importante. Sin embargo, es esperable que la mayor afectación la reciban las personas que han perdido seres queridos y sus bienes, por ejemplo quienes han perdido sus hogares. Una casa es mucho más que un inmueble, para algunas personas ha sido un refugio y el trabajo de toda una vida ha desaparecido, asi también sus recuerdos. En estos casos es esperable un verdadero proceso de duelo”.
“En este sentido, hace una semana acá en Marchigue hemos tenido un incendio que se acercó bastante al cementerio local, podemos decir que afortunadamente eso pudo ser contenido, pues este lugar es de suma importancia para las personas, la amenaza de haberlo perdido generó grandes montos de angustia en la población, en este lugar aún se encuentra depositado una parte del amor que sentimos por personas que fueron importante para nuesta vida, es un lugar significativo en la elaboración de un duelo. Citamos este episodo para graficar la importancia de los espacios fisicos y el ambiente en la salud mental”.
“Por otro lado es posible que los tratamientos que llevabamos en salud mental, tengan detenciones y/o regresiones, debido a la ansiedad y a la angustia actual que genera la amenza del fuego. Uno podría esperar ciertas desestabilizaciones en la comunidad. Esto último es algo que quizás veamos en el futuro. Ejemplo de esto fue el terremoto del 2010. Hasta hace pocos meses aún recibíamos pacientes que localizaban como momento inaugural de la sintomatología el terremoto del 27/F. Si usted piensa, eso ocurrió hace casi 7 años pero aún sigue siendo un motivo de consulta”.
¿Qué sectores se vieron mayormente afectados?
“Los límites con Pumanque, con Pichilemu, Litueche y Santa Cruz. Es decir, sectores como: La Quebrada, La Pitra, Lo Marchant, todo lo que es Rinconada de Alcones, Alcones y Las Garzas”.
¿Qué medidas o dispositivos activarán para contener a la población?
“Bueno, por un lado hemos desarrollado visitas domiciliarias que esperamos poder manetenerlas con mayor frecuencia y sostenerlas durante el tiempo a los pacientes que lo requieran, y gestionar los tratamientos de los pacientes que se encuentren más afectados, sobre todo en los sectores más damnificados. Es importante que esto no se diluya en el tiempo, al principio existe mucha motivación por ayudar y eso debe sostenerse. Junto a ello nos gustaría extender las horas de atención con las que cuenta hoy nuestra unidad. Eso como acciones concretas. Como medidas terapéuticas, nosotros venimos apoyándonos bastante en el dispositivo de atención grupal, veremos si existe la posibilidad de instalar espacios de psicoterapia grupal para quienes lo necesiten”.
“Creemos importante que durante este tiempo se pueda generar espacios para las escuchas de los niños, nos parece una población a la que hay que dedicarle atención al igual que los adultos mayores. En relación a los niños estamos disponibles para orientar y articular un trabajo en los establecimientos educacionales que estén interesados cuando ellos reanuden sus clases”.
“Finalmente creemos que la mayor medida que podemos activar, es sostener el espacio que hemos venido generando hace ya tres años. Una unidad de salud mental centrada en el sufrimiento particular del sujeto, un espacio de escucha para la comunidad, sobre todos para quienes no lo pueden costear. Mantenemos en este momento nuestro compromiso de escucha para la comunidad. Para esto es importante contar con el apoyo de todos, de apoyar el trabajo de las unidades de salud mental a lo largo del país, de los centros de tratamientos y todos los dispositivos de atención que trabajan con el malestar, la angustia y el padecimiento del ser humano. Tenemos que seguir creciendo en la cobertura, aún hay mucho que hacer y es una labor que no puede esperar”.
“Somos un país que constantemente la naturaleza nos está recordando su omnipotencia, esto es una carga mayor a todos nuestros sufrimientos ya presentes”.
¿Qué llamado pueden hacer a la comunidad en estos momentos?
“A la comunidad quisiéramos decirle que el duelo por que el pasarán seguramente va a ser muy doloroso y estamos dispuestos a acompañarlos si nos permiten, que la vida vale la pena seguir viviéndola a pesar de haber perdido mucho. A las autoridades que puedan leer esta nota, comunicarles que es necesario volver a reconstruir todo lo que este incendio ha destruido, sin descuidar la seguridad de las personas y el cuidado de la naturaleza; que tenemos que aprender mucho de este evento; puede ser una oportunidad para ser un mejor país”.