Este sábado 2 de septiembre a las 24 horas tenemos que adelantar nuestros relojes en 1 hora, pasando así al horario de verano en nuestro país, pero ¿cuáles son los verdaderos efectos
Así nos indica Francisco Álvarez Román, académico de la Escuela de Química y Farmacia, UNAB Sede Viña del Mar. Como agosto es el mes del corazón, partamos diciendo qué tan beneficioso es el cambio de hora para este importante órgano, que es nuestro motor. Según lo que señala la Sociedad Americana del Corazón hay varios estudios que demuestran los efectos dañinos en la salud al adelantar 1 hora en primavera. Por ejemplo, un estudio realizado por académicos de Medicina de las Universidades de Michigan y Colorado, en Estados Unidos, demuestran que puede aumentar el riesgo en un 24% de tener un infarto el día siguiente, o sea el domingo, y en menor grado al día subsiguiente, que sería el lunes. Este riesgo queda de mayor evidencia en aquellas personas que tienen antecedentes de enfermedades cardíacas.
Por otra parte, un estudio realizado por miembros de la Sociedad Cardiaca de Finlandia encontraron que el cambio de hora aumenta el riesgo en un 8% del desarrollo de un accidente cerebrovascular isquémico hasta los 2 días siguientes al cambio de hora.
Ahora por qué se produce esto, la teoría es que estos eventos se desencadenan por el cambio de nuestro reloj interno, es decir, nuestro ciclo circadiano como por ejemplo el dormir 1 hora menos, la desregulación del sistema inmune y el de nuestro tono simpático.
El dormir menos implica una deprivación del sueño, que puede alterar los procesos de nuestro cuerpo como también la respuesta inflamatoria, aumentando el riesgo de eventos cardiovasculares.
Por otra parte, el cambio de horario afecta nuestro sistema inmune, ya que la respuesta inmune depende mucho del tiempo del día, el cambio puede producir un estado proinflamatoria que aumenta el riesgo de lo anterior.
Asimismo, nuestro tono simpático cambia, que es por ejemplo el que tiene relación con el estado de alerta cuando nos despertamos en la mañana. Este tono estimula una serie de señales que le dicen al cuerpo, ¡Hey!! estás despierto, tienes que funcionar. Cuando una persona está deprivada del sueño, por esta hora menos, el estado del tono simpático aumenta, por lo tanto, aumenta el riesgo de desarrollo de estos eventos cardiovasculares que nos pueden llevar a la muerte.
¿Cómo nos preparamos para disminuir o evitar los daños en la salud del cambio de hora? Empezando por recibir la mayor cantidad de luz posible, esto puede ayudar a empezar a ajustar el ritmo circadiano para el cambio que se viene. Comenzar a relajarse o dormir un poco más temprano en las noches anteriores. Sabemos que nunca se podrá recuperar el sueño perdido, pero es importante llegar descansado al día que se cambie la hora.