La tarde del pasado miércoles, el fiscal de la Macrozona O’Higgins, solicitó que personal de la Brigada de Homicidios (BH) Rancagua, concurriera hasta el Hospital Regional de la misma ciudad
Teniendo como finalidad investigar las circunstancias en las que un hombre de 47 años de edad fue internado de urgencia en el aquel recinto asistencial, donde minutos más tarde perdió la vida.
Conforme a los antecedentes recopilados por los detectives en el centro hospitalario, la víctima ingresó al lugar con una con traumatismo abdominal por proyectil balístico de tipo homicida, lo que le habría provocado la muerte.
Durante la misma jornada del pasado 12 de octubre, la BH Rancagua, junto al Laboratorio de Criminalística Regional de la PDI, se trasladaron hasta el lugar donde habría ocurrido la agresión, correspondiente al exterior de una vivienda ubicada en la Villa San Ramón, en el sector poniente de Rancagua, sector donde residían la víctima y la persona imputada de quitarle la vida.
De acuerdo a los testimonios recogidos por la PDI, en horas de la mañana del miércoles pasado, debido a la poca pericia que la víctima tenía en la conducción vehicular, habría golpeado el portón de la casa del imputado, provocando daños en la propiedad.
Horas más tarde, ambos involucrados se habrían enfrascado en una discusión que terminó cuando el imputado -también de 47 años de edad- le disparó, provocando las lesiones que le causaron la muerte.
Desde aquel día, la PDI estuvo tras la pista del agresor que se había dado a la fuga, quien, debido al cerco policial en torno a su círculo cercano, habría coordinado con su abogado defensor para entregarse a la Brigada de Homicidios Rancagua, unidad especializada que informó los hechos al fiscal de la causa, quien instruyó que el detenido fuese puesto a disposición del Juzgado de Garantía de Rancagua, para su correspondiente control de detención.
Al ser consultada, la policía civil indicó que la víctima y el imputado registraban antecedentes policiales por diferentes delitos.