En la comuna de Rancagua la Seremi de Salud Dra. Carolina Torres participó en la constitución del primer “Comité Regional de Vigilancia de la Indicación de Cesárea”. En la oportunidad, participaron Ginecoobstetras del sector público y privado, y representantes del Servicio de Salud O’Higgins, además de funcionarios de la Secretaría Regional Ministerial de Salud
“La cesárea es un procedimiento que puede ser útil en disminuir la mortalidad y morbilidad materna y perinatal cuando está justificada desde el punto de vista médico. Sin embargo, en ausencia de justificación, no están demostrados los beneficios para las mujeres o neonatos, por lo que los riesgos a corto y largo plazo, pueden afectar la salud de la mujer ante nuevos embarazos, incrementando los costos en salud asociados”. Puntualizó la Seremi de Salud Dra. Carolina Torres.
Por otra parte, Waleska Ebner, encargada Programa de Salud de la Mujer de la Seremi de Salud O´Higgins, expresó que “los esfuerzos deben estar dirigidos a la prevención segura de la primera cesárea, donde la atención de los equipos de Salud aborde el apoyo emocional a la gestante, el uso de mínimas intervenciones, y exista el tiempo necesario para que se desarrolle el proceso natural, así como también la apertura y/o implementación de las salas de atención integral de partos y el acompañamiento continuo en los establecimientos, estas medidas han demostrado que reducen las cesáreas”.
Respecto a la situación regional, Waleska Ebner, destacó que “en la región de O’Higgins, entre enero a octubre de 2021 el porcentaje de cesáreas en la red asistencial pública fue de un 52% y en el sector privado alcanzó un 67,9%. La Cesárea es un problema de salud pública presente a nivel nacional y regional, que aumenta la morbimortalidad perinatal y los costos en salud. En base a esto, esperamos que este Comité logre potenciar entre los equipos médicos hacer lo posible para realizar cesáreas solo en aquellas pacientes que lo necesiten por razones médicas justificadas”.
Chile promedia un porcentaje histórico de cesáreas superior al 40% indicador que lo posiciona entre los países con más altas tasas de cesáreas de la Organización para la Cooperación y Desarrollo Económico (OCDE), presentando un 47% de cesáreas el año 2017, siendo solo superado por México (48,7%), y Turquía (53,1%). En el año 2019 la red asistencial pública presentó un porcentaje de cesáreas de 42,95% estando aún lejos del promedio de la OCDE, el cual es cercano al 28%.