La labor que distingue a ambos en torno a la salud, marcada por la pandemia, es sinónimo hoy de entrega, coraje, perseverancia, siendo esenciales en la promoción del bienestar de todos
Para el Hospital Regional del Libertador Bernardo O’Higgins (HRLBO) los médicos y asimismo los oficiales administrativos, constituyen una pieza clave en la misión que todo hospital tiene, que es promover que cada persona que acude al recinto, reciba un trato digno, oportuno, humano y con una respuesta de calidad frente a la afección que padece.
En ese contexto el Dr. Carlos Bisbal, director (s) del Hospital Regional de Rancagua expresa, que “es tremendamente importante destacar el apoyo que puede generarse entre médicos y oficiales administrativos en un centro de salud como este hospital, que trabaja en pos de una salud de calidad, segura y humanizada”.
Agregando -en torno a ambas figuras- lo importante que es su trabajo como equipo, en cuanto a resolver la condición de salud, “por un lado, el médico que puede ayudar a un enfermo en todos sus estados de salud, quiero decir, podemos atender a una persona en estado crítico, grave, menos grave, etc.; y en todas las acciones existe un mismo fin: sanar a nuestro paciente. Mientras que, en el ámbito de nuestras oficiales administrativas, gestionan, ordenan, agendan, administran, con el objetivo, que es solucionar los inconvenientes clínicos de los pacientes”.
Miguel Gonzáles, médico cardiólogo e internista del hospital, releva el reconocimiento recibido en este día conmemorativo subrayando, a sus 37 años de trabajo en el centro de salud que, “el hospital me ha dado la experiencia, el saber, la continuidad. Me ha dado la oportunidad de sentirme médico, de aprender trabajando en equipo y es ahí donde enfatizo cómo se fortalece el conocimiento, la cercanía para tratar a nuestros pacientes y darles confortabilidad en su atención de forma íntegra, tanto en la salud como en la estadía y concurrencia”.
Por su parte, la oficial administrativa, Isabel Salas, sostiene que “la labor que realizamos es fundamental, porque permite contribuir permanentemente a que exista una conexión cercana, humana, con todos los usuarios, pacientes y familiares que necesitan este hospital”, añadiendo que “me siento además muy agradecida por el reconocimiento que he recibido de muchos funcionarios del HRLBO por esta labor conjunta con los médicos”.