El doctor Fuad Hamed, candidato independiente a diputado por el distrito 15, se considera a sí mismo como una persona que “nunca será políticamente correcta” y por esos sus expresiones en esta campaña encuentran sustento en tres pilares fundamentales; el respeto, los acuerdos, el diálogo y la sinceridad a toda prueba, aunque esta última incomode en ciertos espacios de la vida diaria
En ese sentido y para abordar uno de los temas más recurrentes y nefastos en todos los gobiernos, responde con la misma franqueza ya descrita. “Las listas de espera en los hospitales chilenos nunca se va a acabar”, señala. A renglón seguido el facultativo indica que, “en términos generales la demanda en salud es infinita, es decir, los requerimientos son muchísimos y si tu abres la puerta nunca se acaba. Por ejemplo, hipotético por cierto, si se establece un programa de cirugía plástica gratuita en un servicio, ¿qué ocurrirá con las personas? Lo más probable que al otro día haya una fila de 5 kilómetros de gente esperando y eso que no es algo de urgencia”, explica Hamed.
Inmerso en ese escenario y para controlar la demanda, el candidato independiente del Frente Social Cristiano, entrega su visión. “El sistema público lo hace con las “colas” (por eso nunca desaparecerán) y el privado, con los costos. Recuerdo que cuando el ex Presidente Lagos, le pidió a la entonces Ministra de Salud, Michelle Bachelet, terminar con las filas en dos meses, nosotros como médicos nos sorprendimos, porque técnicamente es imposible.
¿Pero cuál es la solución?
Fuad Hamed, obstetra con 30 años de experiencia en la región, establece que se pueden optimizar los tiempos, “mejorando los programas de integración entre el sistema público y privado, tal como se ha hecho en la pandemia y no verlos como entes antagónicos. De esa manera, las listas de espera del ámbito público son resueltas por los privados y una buena demostración de los efectos positivos de esta unión, son los programas PAD (Pago Asociado a Diagnóstico). Aquí las personas que tienen Fonasa, pagando un monto fijo muy inferior tienen acceso a las clínicas en el país. Yo desde el Congreso trabajaré con toda mi fuerza legislativa para que este modelo se replique y contemple aun más patologías, con mayor aporte del Estado y así bajar el costo del copago final por parte de los pacientes”.
Por último, otra alternativa viable “es mejorar la eficiencia en la atención primaria, aumentando el número de especialistas para evitar las interconsultas al hospital. Cabe destacar que este hecho se perdió cuando las municipalidades tomaron el control administrativo de los policlínicos”, concluye el candidato independiente.