El espacio colaborativo ubicado en la comuna de Nancagua, busca ser un foco de cambio social y fuente de oportunidades para que los emprendedores puedan desarrollarse y fortalecerse en sus comunidades locales
Conocida por ser una zona eminentemente agrícola en el Valle de Colchagua, la comuna de Nancagua –ubicada a 80 kilómetros de la capital regional de O’Higgins- se ha destacado en la producción de frutas, vegetales y sobre todo, por el desarrollo vitivinícola, concentrando una alta población dedicada a la generación de emprendimientos rurales.
La elaboración de mostos, vinos y aguardiente son parte de las actividades productivas más recurrentes, principalmente por el clima y los suelos de este sector, que posibilitan una cosecha favorable de vides. En este aspecto, la entrega de oportunidades y capacitación para que los emprendedores rurales puedan surgir en estas actividades, juega un rol clave en el éxito futuro de sus proyectos.
Visualizando esta situación y con un foco directo en escolares, adultos mayores, microempresarios y emprendedores de sectores rurales, la Fundación de Capacitación Vida Rural de la Pontificia Universidad Católica de Chile puso en marcha el funcionamiento de la Casa Encuentro Nancagua UC. Se trata de un espacio colaborativo destinado a convocar a diversos actores en el Valle de Colchagua, generando actividades sociales, culturales y formativas.
El espacio colaborativo busca ser un agente de cambio social y fuente de oportunidades para todas las personas, fortaleciendo el desarrollo rural y de las comunidades. “Nuestra fundación hace una labor maravillosa, no sólo en beneficio de la comuna sino que de todo el mundo rural y sus alrededores. Es más que Nancagua, es la región, la que queremos impulsar. Hay muy buena disposición de parte del Centro de Innovación UC y autoridades regionales para poder potenciar este lugar”, destaca Jaime Bellolio Rodríguez, Director de la Fundación de Vida Rural UC.
Uno de los pilares que proporciona este espacio es poder aportar desde el ámbito social, cultural, artístico y científico, para colaborar con un desarrollo local sostenible que nutra de manera integral a las personas del territorio. “Esta Casa Encuentro abrió sus puertas hace un año, nos ha tocado el estallido social y la pandemia. Luego de reunirnos con autoridades, esperamos que sea el punto de partida de una nueva etapa, donde podamos transformar idealmente a este lugar en un nodo de emprendimiento”, comenta el Vicerrector Académico de la Universidad Católica, Fernando Purcell.
Este lugar de encuentro aspira a convertirse en el principal referente local en materia de capacitación y educación rural, consolidándose además en un espacio de aprendizaje, de conexión permanente de las personas y de promoción cultural, cuyo sello distintivo esté en el rescate de las tradiciones y el patrimonio de la comuna.
Un espacio para todos
Como una manera de conocer el trabajo desarrollado, autoridades regionales visitaron y conocieron Casa Encuentro UC, lugar que cuenta con salas de capacitación y reunión, cocina, huertos educativos y distintas herramientas para potenciar el desarrollo rural, mejorar la calidad de vida de las personas y fortalecer las comunidades. “Pretendemos ser un foco de encuentro, de desarrollo rural y social, un cambio en la forma de ver el emprendimiento y las necesidades culturales de las personas”, explica la Directora Ejecutiva de Casa Encuentro UC, Elina Carbonell.
En la oportunidad, se unieron actores relevantes del ecosistema del emprendimiento e innovación de la Región de O’Higgins. “El sector público, privado y el mundo de la academia, todos juntos trabajando por el emprendimiento. En este espacio existen aspectos prácticos para atender a estos emprendedores, formarlos, pero también hacerles un acompañamiento de sus proyectos”, profundiza el Director de Emprendimiento del Centro de Innovación UC, Alex Parnas.
Por su parte, el Seremi de Economía, Félix Ortiz remarca: “Esta Casa Encuentro tiene un potencial tremendo. Vamos a potenciar este espacio para emprendedores rurales, de modo que entre ellos se colaboren, trabajen en conjunto y comiencen a crear valor. Lo importante de este centro es que va ser de innovación aplicada, entre emprendedores, para poder salir adelante y mejorar su calidad de vida. Estamos muy contentos y esperanzados en que aquí pueda salir algo muy bueno”.