Estamos asustados. Nos come la ansiedad. Queremos escapar y aún no podemos.
Se ve el abismo que sonrie con ironía macabra. El peligro es inminente y nadie augura un buen futuro
El sentimiento es perverso, quizás la meta ya no exista y el fin de camino está bajo el tsunami que se viene encima. La presión del hincha es total, desde el año 2005 que no vivíamos esta pesadilla y ni la más potente energizante nos despierta.
Qué hacemos?, no tengo idea porque el barco se hunde y los tripulantes ni un esfuerzo hacen para salvarse. Hay que invertir en espíritu y solidaridad, sacar el «cuero de chancho» y darle pa’ delante.
Queda una rueda para dar vuelta el rendimiento y salir airoso de este halloween tenebroso. El «Albo Campion» está en crisis y tenemos que aprovecharnos para impulsarnos al éxito, sé que la tarea no es fácil pero quien no intenta no cruza el río.
Dale Dalcio, ponle color porque tu recuerdo será imborrable si nos salvas de la «B» que nos hace morisquetas y saca la lengua. Eres el hombre llamado a restituir el orden en este momento que nos aflige. No tenemos más tiempo, despierta a tus dirigidos y díles que menos gel y color ceniza en el pelo.