Este Servicio ha presentado un crecimiento constante a nivel de recurso humano, espacio físico y equipamiento, respondiendo a las necesidades de salud de la microárea
Debido a la llegada del Coronavirus, el Servicio de Neonatotología del Hospital de Santa Cruz ha debido reformular sus protocolos de atención para entregar una atención segura y de calidad a sus usuarios, pero este tipo de cambios no son algo desconocido para esta unidad que nació con la construcción del nuevo establecimiento de salud santacruzano y que con el paso de los años se ha ido complejizando cada vez más por medio de la incorporación de equipamiento, recurso humano y especialidades.
En septiembre del año 2010 se inauguraba el nuevo Hospital de Santa Cruz y junto con el iniciaba sus funciones el actual Servicio de Neonatología, que anteriormente era la Unidad de Recién Nacido Patológico, la cual estaba adosada a la Maternidad, pero que ha tenido siempre la misma misión, la de entregar cuidados de salud de recién nacidos, que han tenido alguna complicación en el nacimiento o en sus días posteriores.
Próximo a cumplir 10 años, Neonatología se ha desarrollado en el tiempo con el fin de entregar una respuesta óptima a la creciente población tanto de la comuna de Santa Cruz como de toda la microárea, así nos lo describe su matrona supervisora Fany Castillo, señalando que “ya en el 2010 contábamos con una instalación moderna, para poder atender a cinco recién nacidos con complicaciones, que inicialmente se habría establecido con cuidados mínimos; pero con la voluntad del equipo de salud redestinado, se inició y se empezaron a realizar cuidados de salud más complejos, lográndose hacer atenciones de tratamientos intermedios. Además, se empezaron a realizar atenciones que iban a la vanguardia, similar a lo realizado por el Hospital Regional; cuando en otro tiempo un recién nacido prematuro o con algún problema respiratorio más severo, no tenía cabida en Santa Cruz por no haber equipamiento mínimo”.
La profesional de obstetricia explica que el primer salto de calidad se da en el año 2013, con la llegada de nuevos equipos, señalando que “contábamos con monitores multiparámetros por cada cuna además del soporte respiratorio: el equipo de CPAP de burbujas y posteriormente llegaría un equipo que lograría la estabilización de recién nacidos muy complicados, se trata de nuestro primer ventilador mecánico neonatal. Esto es uno de los primeros hitos importantes de nuestro Servicio, el cual repercutiría favorablemente en nuestros pequeños pacientes y sus familias, ya que no necesitaban trasladarse a San Fernando o Rancagua para recibir atención y es considerado como los inicios de la realización de cuidados intensivos de neonatología en nuestra comuna”
El año 2014 comienza a intensificarse la inmigración a nuestro país, llegando muchos extranjeros de países latinoamericanos y del caribe que aumentaron los nacimientos de toda la microárea y por tanto las demandas de salud de parte de los recién nacidos. Este hecho, según nos cuenta la funcionaria del hospital, contribuyó a que “se incorporaron médicos con especialidad en el área ginecobstetricia y de pediatría, estableciendo uno de hitos más importantes de nuestro establecimiento: contar con médicos con especialidades mínimas en turno; neonatología contaba con pediatra residente de 24 hrs”.
Este aumento de recurso humano vino acompañado de una necesidad de un mayor espacio físico, así lo destaca Fany Castillo, indicando que “la presencia de la especialidad médica de pediatría las 24 horas junto con el aumento de la demanda de hospitalización, hizo que surgiera la necesidad de aumentar el área de hospitalización. Es por esto que se acondicionó un área de sala de visitas, así como una unidad de cuidados mínimos neonatales, ascendiendo los cupos a 9 (6 recién nacido con cuidados de tratamiento intermedio y 3 para cuidados mínimos o básicos). Con la presencia de los especialistas médicos y la demanda, en muchas oportunidades con el apoyo de la formación intensivista del Jefe de Servicio, Dr. Javier Villablanca, se tuvieron algunos recién nacidos en ventilación mecánica invasiva, que se resolvieron en nuestra unidad, sin tener que trasladarlos”.
En la actualidad, el Servicio de Neonatología, compuesto por su jefe el Dr. Javier Villablanca, 6 pediatras de turno 24/7, 1 pediatra diurno para puericultura, 9 técnicos paramédicos, 4 profesionales de matronería exclusivo para UTI-UCI, 4 profesionales de matronería de cuidados básicos, atención inmediata del recién nacido y puericultura además de una matrona supervisora de neonatología, ha alcanzado el reconocimiento necesario para poder atender mayor complejidad, validando el cuidado intensivo.