La actividad creada por la plataforma Tenemos que Hablar de Chile, impulsada por la U. de Chile y la UC, ha reunido al expresidente Lagos con la dirigenta habitacional Kathy Riffo; a la periodista Alejandra Matus con el empresario Patricio Parodi; el presidente de la Sofofa Bernardo Larraín con la presidenta del Sindicato de Trabajadoras de Casa Particular Luz Vidal; entre otros
“Yo tengo una manera de pensar: los ríos no se crean solos, se crean con quebradas y cada una porta el agua que corresponde. Por lo tanto, para que el país avance, se necesita de una buena fuente de conversación”, dijo el vocero de los trabajadores de La Vega Central, Arturo Guerrero, luego de participar en el ciclo “Conversaciones improbables”, donde coincidió en el mismo grupo con la periodista Patricia Politzer y la presidenta de la Federación de Estudiantes de la U. de Chile Emilia Schneider, entre otros.
Dicha instancia fue creada por Tenemos que Hablar de Chile, la plataforma de participación e incidencia ciudadana impulsada por la U. de Chile y la UC junto a más de 40 organizaciones, con el fin de replicar en figuras destacadas y líderes de opinión lo que ya están haciendo miles de habitantes: conversar entre 5 a 6 personas durante de una hora y media por videollamadas acerca del país que anhelan. La iniciativa ofrece tres formas de participación digital y hasta ahora se han recibido 70 mil respuestas de las consultas ciudadanas en línea, mientras que 4 mil personas han participado en las conversaciones grupales por videollamada y otras 4 mil del proceso Chile a Escala, que busca representar y reunir a 1 de cada 1.000 habitantes del país.
Para la periodista Alejandra Matus —quien participó junto al presidente de Consorcio, Patricio Parodi, y la vicepresidenta de TVN y exministra Adriana Delpiano— la experiencia le pareció una instancia enriquecedora por la participación de personas que representan distintas realidades del país. “Me recordó al proceso de los cabildos para la Constitución que se hicieron en el Gobierno de Michelle Bachelet, en que uno llega con la aprehensión de que va a tener desacuerdos y al final la gente está bastante más de acuerdo de lo que uno piensa”, dijo.
Hasta ahora casi 80 personas han participado en las 15 conversaciones que se han realizado y en las cuales se les pregunta qué cosas de Chile creen que se deberían mantener, cambiar y cómo ellos podrían contribuir a eso. Se trata de representantes del mundo empresarial, dirigentes sociales, figuras de medios de comunicación, de la cultura y académicos, cuyas diferencias de visiones enriquecen el debate público.
Roberto Fantuzzi, presidente de la Asociación de Exportadores y Manufacturas (Asexma), habló en su grupo sobre el concepto de empresa familiar, el cual, a su juicio, queda desplazado por la perspectiva económica. “Ese aspecto social es el que no se trata habitualmente”, indicó, mientras que en el grupo de la dirigenta de la industria salmonera Marta Oyarzo se manifestó la “preocupación por el efecto de violencia desmedida que existe en el país, la desigualdad social que se vive en diferentes ámbitos”.
Precisamente la desigualdad y la violencia han sido los temas que más han salido a la luz. La excandidata presidencial Beatriz Sánchez indicó que el punto de desencuentro en su grupo “fue la mirada sobre la violencia en Chile, porque algunos sostenemos que hay una violencia estructural en Chile que está dada por los altos niveles de desigualdad”, contó. La diferencia de opiniones, agregó Sánchez, hizo que se generara una discusión interesante “incluso intensa, pero eso la hizo real”, lo que da cuenta del objetivo de este ciclo: reunir a personas que de otro modo no podrían conversar debido a la barrera geográfica, política, o porque simplemente no se conocen entre sí.
En el caso del grupo de Sylvia Eyzaguirre, investigadora del Centro de Estudios Públicos (CEP) y que participó junto a la senadora Yasna Provoste, hubo un consenso “en la necesidad de cambiar las reglas del juego, refundar las instituciones políticas, y el Plebiscito ofrece una oportunidad para eso. Donde no hubo acuerdo fue en el valor que le otorgamos al respeto mutuo, el aprecio por la diversidad, y el valor al Estado de Derecho”.
En la conversación del 18 de agosto, el expresidente Ricardo Lagos tuvo la oportunidad de compartir con la dirigenta habitacional de Viña del Mar Kathy Riffo; la fiscal de delitos de alta complejidad, Ximena Chong; la investigadora del Instituto de Estudios de la Sociedad (IES), Josefina Araos y el presidente de la CPC, Juan Sutil. En su intervención, el expresidente observó que “hizo crisis el contrato que había entre la sociedad y las instituciones. Y esa crisis es la que hay que arreglar, pero eso implica no sólo cambiar la Constitución, es más que eso” dijo, agregando que, a su parecer, “existe una sensación de que si usted tiene plata le va a ir mejor en este sistema, porque existe una salud pública y privada, una escuela pública y una privada. Si queremos que todos sean iguales en dignidad, tenemos derecho a tener una misma atención. Tenemos que tener una sociedad más solidaria entre nosotros”.