Producto de la pandemia global, los funcionarios del Hospital Regional trabajan completamente cubiertos por elementos de protección, sin embargo, para humanizar la atención decidieron pegar imágenes sonriendo en su vestimenta
Los abrazos y las sonrisas son los afectos físicos que más extrañamos. Intentar descubrir una risa a través de los ojos, cuando la boca está tapada por la incómoda pero necesaria mascarilla, es complejo. Debido a esto, el Hospital Regional Libertador Bernardo O´Higgins (HRLBO) está implementando una iniciativa que permite a los pacientes pediátricos hospitalizados, ver el rostro del personal de salud.
Para ello, el establecimiento inició la campaña denominada “Una sonrisa para ti” que busca entregar a los funcionarios de la Unidad de Cuidados Intensivos Pediátricos (UPCP), fotografías desechables para adherir a su elemento de protección personal (EPP). Gracias a esto, cuando los tens, enfermeras, matronas, kinesiólogos y médicos ingresan a la sala del pequeño hospitalizado, lo hacen usando la fotografía con su sonrisa pegada al pecho.
“Desde que se inició la pandemia hemos debido limitar el contacto de familiares con los pacientes para evitar contagios. El hecho de andar con el EPP desfavorece la entrega de información a los padres, y lo mismo pasa con la atención de los niños. El paciente ve la mascarilla y los ojos, no ve si están sonriendo. Esta campaña nos va a ayudar a humanizar la atención y a dar la posibilidad de que nos vean a la cara y así entregar una sonrisa”, indicó el jefe de la UPC Pediátrica, Dr. Marcos González.
La idea nació del Departamento de Participación y Satisfacción Usuaria, y su jefa, la enfermera Elisabeth Moreno, señaló que “la iniciativa que quisimos implementar en la UPC Pediátrica, va en relación a todas las medida que hemos tomado con los pacientes y en especial con los niños, que hoy no pueden ver a las personas que los atienden y eso hace que su estadía sea menos grata. Con esta imagen pueden ver la cara del equipo médico para generar mayor tranquilidad en ellos”.
El primer paciente beneficiado fue el pequeño Martín, que recibió a la tens que lo ayuda todos los días, junto a la doctora de turno de la UTI Pediátrica. “Es muy buena iniciativa, porque a veces llegan pacientes primerizos en la hospitalización y se asustan al vernos camuflados. Con la fotografía nos podemos identificar y darle más confianza al paciente al momento de ser atendido”, señaló la tens, Nicole Salazar.
“Creo que es una súper buena medida, porque debido a la contingencia en que estamos, debemos estar tapados con mascarilla y todo el equipo, por lo que es mucho más difícil hacer un vínculo con el paciente, sobre todo cuando son niños. Podemos hacer su estadía un poco más agradable”, finalizó la pediatra de la unidad, Dra. María Jesús Ponce.