Esta situación se da en un remedio utilizado por quienes han sido trasplantados, el cual tiene un valor de $750 mil mientras que su Bioequivalente alcanza los $540 mil. El SERNAC solicitó a las principales cadenas de farmacias, mediante oficio, que le informe sobre las políticas comerciales que disponen respecto de la venta de medicamentos al público.
El Ministerio de Salud y el SERNAC manifestaron su preocupación por el acceso y la disponibilidad que tienen los consumidores al momento de comprar un medicamento en las farmacias, considerando las grandes diferencias de precios que actualmente existen, sobre todo en el caso de los remedios de marca y los Bioequivalentes.
Tras una reunión sostenida entre ambas autoridades, el Ministro de Salud, Jaime Mañalich, dio a conocer los resultados de un sondeo de precios realizado por el MINSAL y que comparó los precios de los medicamentos Bioequivalentes y de marca de las tres principales cadenas de farmacias.
Según el estudio, un paciente podría ahorrarse en un año alrededor de dos millones y medio de pesos si opta por un medicamento Bioequivalente respecto de uno de marca.
Esta situación se da en un medicamento que es recetado a pacientes que han tenido un trasplante. El remedio de marca, denominado Prograf, tiene un precio de $750.330 por caja; mientras que el Bioequivalente (Tacrolimus) alcanza un valor de $540.445. Es decir, una diferencia de $209.885, lo que multiplicado en 12 meses significa un ahorro para el usuario de $2.518.620.
Otra diferencia importante se manifiesta en un medicamento que utilizado para controlar el colesterol, cuyo precio de marca, denominado Lipitor, tiene un precio de $47.853; mientras que el Bioequivalente (Atorvastatina) llega a $26.335. Esto es, un ahorro de $258.220 por año.
Hay que recordar que actualmente el Instituto de Salud Pública (ISPCH) ha aprobado la comercialización de 268 medicamentos Bioequivalentes, de los cuales sólo cerca de un 40% se encuentra disponible para la venta en las farmacias.
El Director Nacional del SERNAC, Juan José Ossa, por su parte anunció que el Servicio le solicitó a las 3 principales cadenas de farmacias (SalcoBrand, Cruz Verde y Farmacias Ahumada), que le remitan en un plazo de diez días hábiles, los documentos que contengan las políticas de atención hacia los consumidores y los incentivos impartidos a sus dependientes respecto de la venta de medicamentos.
La documentación requerida es la siguiente:
- La política comercial que dispone la farmacia respecto de la venta de medicamentos al público.
- Los Protocolos de incentivos y/o instrucciones impartidas a sus dependientes respecto de a instar a los consumidores a comprar determinados medicamentos y/o laboratorios.
- Protocolos de incentivos y/o instrucciones impartidas a los funcionarios para que sugieran a los consumidores adquirir un determinado medicamento, aun cuando estos últimos hayan solicitado uno distinto, sea que tenga o no el mismo principio activo.
- Mecanismos de control dispuestos para detectar si sus dependientes incurren en conductas que atenten contra el derecho a la libre elección y a la información veraz y oportuna que les asiste a los consumidores según la Ley del Consumidor.
Una vez recopilada esta información, el SERNAC realizará el análisis respectivo para determinar si alguna de las farmacias incurre en conductas que infrinjan la Ley.
Ossa agregó que el SERNAC, durante la administración del Presidente Sebastián Piñera, ha realizado los máximos esfuerzos para transparentar un mercado tan sensible como lo es la salud, realizando periódicamente sondeos de precios de medicamentos; participando en una mesa de trabajo con las clínicas e isapres, que finalmente significó que estas instituciones de salud privadas se comprometieran a un estándar de información que incluye publicar los listados de precios de sus prestaciones e insumos y solicitando los contratos de las clínicas para ver si tienen cláusulas abusivas, entre otras acciones.