Atrás estarían quedando los bajos rendimientos en el cultivo del ajo, según evaluaciones realizadas por investigadores de INIA, con la utilización de planta libres de virus
En un Día de Campo, realizado el martes recién pasado, en la Unidad Demostrativa, ubicada en INIA Rayentué, profesionales de esta institución del agro, dieron a conocer los resultados de la evaluación en el segundo ciclo de cultivo en campo, bajo malla antiáfido, temporada 2019; utilizando plantas libres de virus generadas por INIA. En esta oportunidad los más de treinta asistentes, entre ellos agricultoras y agricultores, además de profesionales del rubro, pudieron apreciar el calibre y peso de los bulbos, condición que aumenta significativamente el rendimiento de esta hortaliza, versus el método tradicional de cultivo con la utilización de diente-semilla, que los agricultores mantienen por años en sus predios.
Cabe señalar que esta situación está siendo promovida, en la región de O’Higgins, por el Instituto de Investigaciones Agropecuarias, INIA Rayentué, con el financiamiento del Fondo de Innovación para la Competitividad FIC y el gobierno Regional, a través del proyecto “Valorización y Diversificación del cultivo del ajo”, cuyo fin es obtener una producción libre de virus y la identificación de atributos nutracéuticos conducentes a la obtención de un producto de calidad.
A la luz de los resultados, la doctora, Mónica Madariaga, coordinadora del mencionado proyecto FIC, e investigadora de la Unidad de virología en INIA, señaló “esta es una muestra en terreno, de que con semillas de ajos libre de virus mejorarán los rendimientos, además de obtener bulbos más atrayentes y con mejor apariencia. Para conseguir estos resultados, agregó la profesional, siempre hay que tener presente que la semilla es la base de la producción, su calidad permite expresar todo el potencial de la planta, para al final de temporada cosechar bulbos de buen calibre, que por ende son más atractivos para el mercado, tanto nacional como internacional”.